Sa Pobla llora la muerte de Antònia Buades Vallespir, Madò Buades, una mujer que entregó su vida a la conservación de la música popular y que gracias a su labor se potenció la investigación y estudio de las tonades de feina, prácticamente olvidadas.
Antònia Buades, galardonada por el Govern balear en 2002 con el Premi A les Arts y con la Medalla de Oro del Consell en 2001, nació en sa Pobla en 1911. Cantadora de formación autodidacta, hizo de la canción su herramienta de expresión más personal. Ella, una mujer que trabajó sobre la marjal de sa Pobla, escampó a lo largo de su vida su voz no solo por los surcos de la tierra, sino también por los de la historia de la Mallorca más reciente.
Madò Buades paseó su estilo personal e intransferible conservando a la vez la autenticidad de las tonades populares. Acompañada a menudo por su marido Bartomeu Gamundí, a la ximbomba, y por otro maestro ximbomber, Pep Ferrer, ambos auténticos virtuosos de este instrumento, cantó por toda la geografía insular.
En la década de los años 50 ganó un concurso de canciones en Selva y en sa Pobla. A finales de los años 60 formó el grupo musical pobler Ximbombes i Cantadors que, con ella de protagonista, actuó por toda Mallorca, grabó algunos programas de televisión y grabó varios discos. En mayo de 1968 ganó el I Concurso Nacional de Folklore del Estado español, con la canción Perendenga. Tenía 57 años. En 2005 publicó Cançons amb sa ximbomba i tonades del camp de Mallorca, de la mano de Unió Músics.
Entre las primeras reacciones a la noticia, las del departamento de Cultura i Patrimoni del Consell, que lamentó ayer la pérdida de Buades.
