Las monjas podrán trasladar y custodiar de modo temporal las obras de arte protegidas de Sant Jeroni a Sant Bartomeu d'Inca, tal y como pidieron desde el momento en que fueron descubiertas en una operación clandestina. Así lo acordó ayer la Comissió Insular de Patrimoni Històric, que aprueba los planes de la orden religiosa siempre y cuando se resuelvan una serie de "deficiencias".

Tal y como señaló la directora insular de Patrimoni Kika Coll el pasado domingo en una entrevista publicada por DIARIO de MALLORCA, "hay que tener mucho cuidado en deshacer las colecciones que han perdurado durante siglos. Es muy peligroso". De ahí que se haya decidido que el traslado a Inca sea de "manera puntual" y obligado por el estado "delicado" que presenta el inmueble de Sant Jeroni.

Por lo que se refiere a los bienes muebles que serán trasladados y quedarán en depósito en Sant Bartomeu, "se tendrá que presentar en un plazo máximo de dos meses un proyecto redactado por un conservador restaurador". Un proyecto que reflejará, entre otras cuestiones, una ficha individualizada de cada pieza que se quiera trasladar y que incluirá datos básicos, estado de conservación y diagnóstico, condiciones de manipulación, embalaje y almacenamiento, y ubicación y condiciones de conservación preventiva; y un estudio de las condiciones de las nuevas zonas de depósito temporal.

Asimismo, se les exige a las jerónimas que presenten en un plazo máximo de dos meses un documento técnico redactado por un arquitecto referente al inmueble de Sant Bartomeu.

Respecto a los bienes muebles que permanecerán en Sant Jeroni, "se tendrán que tomar unas medidas mínimas e inminentes para paliar y corregir los problemas derivados del abondono del edificio, especialmente los relacionados con las filtraciones de humedad y la seguridad", señala Patrimoni.

En este sentido, el Consell marca como plazo máximo tres meses para evitar el deterioro de un edificio que sufre graves deterioros y adoptar medidas "con tal de garantizar la seguridad tanto anti-incendios como estructural".

Por otra parte, Patrimoni también ha aprobado declarar Bien de Interés Cultural (BIC) el busto de Augusto que fue encontrado en el siglo XVI en Pol·lentia y que se intentó subastar a través de Christie's. El busto representa la efigie del citado emperador romano, data de finales del siglo I (a C.) y puede considerarse uno de los primeros descubrimientos arqueológicos documentados en Mallorca.