Con barba y una gorra con visera de camuflaje se paseaba ayer por Palma el oscarizado Adrien Brody (Nueva York, 1973). El actor, ataviado también con una camiseta gris y pantalón negro, conoció algunos de los lugares y comercios más emblemáticos de la ciudad antes de viajar a Eivissa. A pesar de su fama y gran reconocimiento, pasó bastante desapercibido por las calles de Ciutat.El cicerone de tal visita fue el artista mallorquín afincado en Nueva York Domingo Zapata, íntimo del protagonista de El pianista. La travesía matutina por la ciudad desembocó cerca de la plaza del Mercat, en Can Frasquet, reconvertido en restaurante desde que cerrara su puertas como confitería. El actor se sentó allí a manteles con el artista isleño y se fotografió con una amiga de éste, Gaby Bianco.
La estrella de cine, que lucía ayer bronceado, se aloja en el hotel Son Vida y hoy mismo podría poner rumbo a la Pitiüsa, donde Zapata expone algunos de sus lienzos. En concreto, las pinturas pueden contemplarse en el Hotel Ushaïa Tower.
Tal y como ha podido saber este diario, es probable que Brody regrese a Mallorca después de la visita ibicenca para disfrutar durante algunos días más de la isla.
Ganó el premio Óscar al mejor actor por su actuación en El pianista en 2002, convirtiéndose en el intérprete más joven de la historia en haber ganado en esa categoría. Por esta misma cinta, se alzó con el César, lo cual lo convirtió en el único actor estadounidense que había recibido dicho galardón.
Una de sus últimas películas es el thriller Septembers of Shiraz, en cuyo reparto también consta Salma Hayek. También ha protagonizado Emperor, de Lee Tamahori, que actualmente está en fase de postproducción.
