Un restaurante catalán cobró una aspirina a un cliente que la solicitó para aliviar un malestar que sufrió mientras comía. El cliente ha querido denunciarlo en las redes sociales colgando una imagen en Twitter. En la foto se puede ver cómo el restaurante le cobró 25 céntimos por la aspirina.

El afectado asegura que en ningún momento fue avisado de que le cobrarían por lo que él consideraba un favor.

Otros usuarios de la red social especularon sobre la posibilidad de que el cobro suponga una venta ilegal de medicamentos y sus posibles sanciones.