Hay quienes mantienen que las segundas partes nunca fueron buenas pero cuando se trata de la fiesta Flower Power de Pacha Ibiza, la teoría falla. Por segunda vez este verano la fiesta por excelencia de la isla pitiüsa desembarcó en Pacha Mallorca en una sesión hecha a medida para Palma y, como era de esperar, el éxito se repitió. Y es que los mallorquines son muy receptivos a esta fiesta ´retro´.

Fue una noche inolvidable. Los asistentes, que volvieron a abarrotar el recinto, enloquecieron con una velada llena de color e imaginación. Durante toda la madrugada se dejaron llevar por la música de Víctor Nebot y se impregnaron del espíritu peace and love. Pasión, diversión, rebeldía, utopía, juventud, experimentación, color, creatividad... son algunos de los adjetivos que llenaron de significado aquella dorada época hippie y que permiten trazar la sinopsis de uno de los acontecimientos más deseados por los verdaderos conocedores de la isla de la música y la libertad.

En la noche del viernes, la quintaesencia de Pacha Ibiza volvió por segunda vez a Palma y dejó una velada única, sensacional e irreproducible. El club de las cerezas hizo soñar a más de uno con el deseado regreso de la auténtica fiesta Flower Power.

La velada del 31 de julio fue una de las más hippies del verano en Pacha Mallorca ya que la auténtica fiesta Flows. No faltaron las canciones típicas de esa época como All you need is love o Walking on sunshine. Los que se perdieron esta cita veraniega tienen una nueva oportunidad. El 21 de agosto el espíritu de Pacha Ibiza y su Flower Power regresará a Palma con una segunda velada hippie llena de color e imaginación. Los que asistieron a la primera cita, seguro que repiten.