La gala benéfica anual de la Fundación RANA se celebró ayer en la Finca Son Mir, en Camí Vell de Sineu, km 7,250. Un encuentro que rezumó solidaridad y congregó a un buen número de asistentes en este escenario emblemático del siglo XVII, propiedad de Pep Riera.

Este ha sido el séptimo año en el que la Fundación RANA ha solicitado colaboración para la difusión de este acto benéfico que organiza con entusiasmo y un fin: recaudar los fondos que les permitan continuar con el trabajo de formación, prevención y sensibilización social del abuso sexual a menores, que lleva a cabo desde 2005. Concretamente son ya más de 13.000 niños de Balears que han aprendido con RANA a saber decir no frente a un posible abuso, y varios cientos los adolescentes a los que han enseñado a prevenir el maltrato y el abuso en todos los ámbitos, a relacionarse dentro de un marco de respeto y a fomentar la confianza con quienes en caso necesario acudirán en su auxilio.

Asimismo, son muchas las víctimas adultas que sufrieron abuso sexual durante su infancia las que solicitan a RANA ayuda terapéutica, y su ilusión y deber es atender al mayor número posible de ellas, para lo que necestian del esfuerzo de todos los que entienden y comparten la importancia de su trabajo.