El sector teatral se unió ayer bajo el lema "El Consell de Mallorca le da la espalda al teatro y a la danza". Representantes de la Associació d'Empreses Illescena, de los actores, dramaturgos y teatros públicos lamentaron que la institución insular no haya fomentado las artes escénicas "durante más de tres años" por una "paralización" de la propia Administración -"una maquinota burocratizada", la definieron- que ha provocado también un estancamiento del sector. "A nosotros no nos han recortado, nos han suprimido directamente", protestó junto a sus compañeros de profesión el actor y también dramaturgo Salvador Oliva.
La falta de previsión del Consell, que no ha permitido a los teatros de los municipios ofrecer una cartelera estable con actividades los doce meses del año, fue otra de las críticas expuestas durante el acto reivindicativo de ayer, al que fueron invitados tanto el vicepresidente de Cultura Joan Rotger, quien no se encontraba en la Misericòrdia, como la directora insular de Cultura, Catalina Sureda, quien prefirió no abandonar su despacho.
El motivo principal por el que se convocó la protesta fue el Circuit d'Arts Escèniques (CAEM), una ayuda para que la red de teatros de Mallorca puedan programar de manera estable los diferentes montajes que se van produciendo en la isla. "En 2012 no existió, en 2013 tampoco y en 2014 no duró todo el año y sólo se concentró en pocos meses", sostuvo Pere Santandreu de la Associació de Teatres Públics. "Estamos en mayo y el de este año todavía no está en marcha", agregó. "Queremos un sistema que funcione a imagen y semejanza del de otros territorios de España", agregó. "Para ello es importante que se produzca una agilización de la institución, eliminando las trabas administrativas", subrayó.
Asimismo, Santandreu comentó que el Consell se ha ahorrado "cientos de miles de euros" con las convocatorias del CAEM que en lugar de ser anuales han resultado tener una duración de pocos meses.
"En los últimos 20 años se había creado un sistema que permitía que hubiera creación y creadores, una profesión. Era una escena frágil, incipiente y que empezaba a funcionar. Toda Mallorca tenía teatro, pero en estos últimos tres años se ha eliminado y destruido este sistema", refirió. "Hemos estado esperando años a que mejorara pero al final no ha sido así", explicó. También quiso aclarar que la reivindicación de ayer, durante la cual se leyó un manifiesto, "es a la institución, gobierne quien gobierne".
Fàtima Riera de Illescena comentó que desde el sector se ha propuesto a la institución insular un sistema similar al de Platea. "El Circuit debería empezar el 1 de enero y acabar el 31 de diciembre y en él deberían tener cabida los espectáculos frescos, los estrenos. No deberían ofrecerse montajes de manera gratuita y deberían establecerse unos mínimos en los precios de las entradas. El riesgo debería repartirse entre todos los implicados y no ser como hasta ahora, cuando el Consell era el que pagaba un 60% fijo del caché", comentó.
Por su parte, la directora insular de Cultura Catalina Sureda, quien recordó que las ayudas a la producción se habían convocado cada año desde 2012, reconoció que los últimos Circuits convocados no habían funcionado.
Subvenciones encubiertas
"La tramitación es lenta, pero debe cumplirse. En 2011 se daban estas ayudas desde el Teatre Principal pero no existía una fiscalización de las mismas, funcionaban como subvenciones encubiertas", explicó. "Los teatros pagaban una parte directamente a las compañías y esto no es posible según la ley de subvenciones", agregó. "Por eso pasaron a convocarse desde el Consell, donde aplicamos la publicidad y la concurrencia pública", indicó. "El Circuit en el Principal era un desastre. Gente del propio sector que estaba en la comisión evaluadora se daba a sí misma las ayudas", apuntó.
"El problema que tuvimos en 2012 con el Circuit fue que preparamos una convocatoria de ayudas para el sector e Intervención nos lo paralizó porque nos dijo que debería ser una convocatoria dirigida a los teatros", explicó. El retraso se extendió hasta mayo de 2013, cuando se abrió el primer bolsín de espectáculos, que vino seguido de una segunda tanda abierta en agosto. "Dado que se creó un vacío entre agosto y diciembre de ese año, para compensar creamos la convocatoria de Cultura en Xarxa", indicó. Sureda también recordó que acaba de convocarse el Circuit de 2015, unas ayudas "que no se podrán en marcha hasta octubre", calcularon desde el sector. "En realidad, tendremos menos de tres meses de Circuit", protestaron. La directora insular anunció que en septiembre convocarán las nuevas bases con un anticipo de gasto del Circuit de 2016, "más ágil y que sigue las recomendaciones que nos ha hecho llegar el sector", detalló. Una convocatoria que alegra a los profesionales pero que se la toman con muchas reservas después de una legislatura dura y "que ha dado la espalda a las artes escénicas".
