El Espai Mallorca de Barcelona vive sus últimos días. El centro del barrio del Carme cerrará sus puertas a principios de noviembre después de catorce años dedicados a promocionar y difundir la cultura de Balears en Cataluña. Así lo confirmó ayer a este diario Josep Joan Vidal, del Gremi d´Editors de les Balears, entidad gestora del espacio.
La decisión del cierre, que se hará realidad en quince días, se ha acordado con las instituciones públicas que aportan dinero al Espai, como son el Consell, Govern balear e Institució de les Lletres Catalanes.
"Los problemas financieros son insalvables y la situación, insostenible. No quedaba otra alternativa y la decisión es muy dolorosa para el Gremi", afirmó Josep Joan Vidal.
La noticia del cierre llegó al Espai Mallorca el pasado jueves, durante la inauguración de la primera exposición de la nueva temporada, Espai Blanc, del fotógrafo Gabriele Sisti, una muestra-denuncia promovida por una plataforma de usuarios en defensa del Espai denominada Crits i Renou.
El Gremi se lo comunicó a las trabajadoras del centro a través de un correo electrónico, en el que les insta a vaciar el Espai Mallorca en un plazo de quince días.
La reacción entre los defensores del Espai Mallorca no se hizo esperar y ayer las redes sociales hervían contra la decisión del cierre, lamentando la ausencia de un compromiso público que asegure la continuidad del centro y reprochando la nefasta tónica de los últimos tiempos: impagos generales y reiterados tanto a las trabajadoras como a proveedores.
Jordi Vidal, abogado de las trabajadoras del Espai Mallorca, recordó ayer que las empleadas suman dos años cobrando sus nóminas con cuatro meses de retraso y que a finales de este mes acumularán seis pagas pendientes. Las trabajadoras se enfrentarán al Gremi el próximo día 30 de octubre en un juicio que ha sido aplazado dos veces.
A principios de año, las trabajadoras del Espai Mallorca interpusieron una demanda al Gremi por incumplimiento de contrato. El juicio, que debía celebrarse el 15 de marzo, se aplazó en dos ocasiones y quedó pendiente para el próximo día 30 de octubre.
El pasado abril, el Consell pagó al Gremi d´Editors los 85.000 euros que le debía desde el año pasado como parte de la subvención comprometida para el mantenimiento del Espai Mallorca. El Consell tiene presupuestados este año 150.000 euros para el Gremi.
A lo largo de los últimos meses, las trabajadoras del Espai Mallorca denunciaron que de cara a 2012 ni Consell ni Govern se habían comprometido a nada y que aunque la primera institución siempre había expresado su voluntad de apoyar al Espai nunca concretaba en qué consistiría. A dichas reuniones nunca fue convocada la directora del Espai, Amanda Vich, ni se le hizo ningúna consulta al respecto. Vich fue finalmente despedida acusada de realizar declaraciones contra el Gremi de malversación de fondos públicos, algo que desmiente la exdirectora.
