A la entrada, un enorme candelabro del que prende una vela de 100 kilos. Todo lo que una vez fue es el inicio de la nueva exposición de Susy Gómez en Horrach Moyà que, sin embargo, encuentra su origen en una foto antigua, fechada en 1909, y que ella encontró en su casa sin saber el origen ni quiénes aparecen en ella.

"Es la primera imagen del vídeo que presento y que ha dado pie A los ojos de todo. El círculo de personas enlazadas, con un hombre en el centro, en la Cala Sant Vicenç lo he contextualizado al concluir el vídeo con otro corro de jóvenes que están en el interior de la isla", relata Gómez.

La figura del círculo simboliza la memoria que ella atraviesa con un sentido positivo. "A nuestra generación nos toca asentir. En lugar de ir en contra, yo prefiero hablar de transformar", asegura.

Sus instalaciones –además del gigante candelabro, presenta un círculo de zapatos de hombre y mujer con frases de la propia artista sujetas y un tendedero de ropa negra a oscuras–, sus lienzos y sus esculturas miran al pasado. No en vano, Susy Gómez lleva años estudiando las constelaciones familiares. "Sí, sí, están claramente relacionados". Y con una presencia abultada de mujeres.

"No me doy cuenta. Esta exposición enfatiza crear el espacio atemporal de personas anónimas que crearon símbolos", señala.

Ella da vueltas en sus explicaciones a ese laberinto concéntrico de miradas. "He querido invitar a cuestionar la falsa identidad que uno se construye de sí mismo".

Surge de la cueva oscura donde se proyecta el vídeo una música sugerente, "compuesta por amigos que no quieren revelar su identidad porque no quieren ser esclavos de ella". Sigue prendido el velón, otro desafío a la escala de esta artista Gulliver.

"Usar escalas tan grandes es un gesto de humildad, la de ponerse delante de un objeto cuando tú te sientes mayor que él", dice.

´a los ojos de todo´

Susy Gómez

Galería Horrach Moyà

Inauguración hoy a las 20 horas