La opinión de Toni Ruiz: La ley de Murphy y el Mallorca

Cómo explicar el nefasto regreso a la competición del Real Mallorca en este 2025. 450 minutos -si contamos Copa y Supercopa- sin marcar un gol y sin ser capaces de mantener la portería a cero. El grupo de Arrasate ha pasado de ser la revelación en la Liga, un modesto en posiciones europeas en 2024, al peor en el nuevo año. El técnico de Berriatúa ya ha vivido situaciones como esta. De hecho, el pasado año, con Osasuna, encadenó cuatro derrotas consecutivas entre la jornada 31 y la 34.  

El inicio de Liga nos mostró un Mallorca aguerrido en defensa, gracias en parte a los buenos fundamentos adquiridos con Aguirre, y un equipo que rentabilizaba como nadie sus goles. Con diez marcados se sumaron 17 puntos en apenas diez jornadas. Todo ha cambiado tras el periplo en Arabia, es como si el Mallorca quisiera darle la razón a aquellos que esgrimen la ley de Murphy. Para aquellos que la desconozcan, es un adagio que dice: «Si algo puede salir mal, saldrá mal». Esta teoría se utiliza a menudo para explicar el miedo o la ansiedad que las personas sienten ante la posibilidad de que algo salga mal en cualquier situación.  

El miedo a que algo salga mal puede estar relacionado con la tendencia humana a anticipar y prepararse para posibles problemas. Esta ansiedad puede ser útil en algunos casos, ya que nos motiva a planificar y tomar precauciones. Sin embargo, también puede ser paralizante si nos enfocamos demasiado en los posibles resultados negativos. Ante el Atlético, Arrasate apostó por la defensa de cinco, lo que provocó que la creación de juego en el medio campo se hiciera más compleja, aunque de eso tienen culpa Darder, Samu y Dani. 

Para manejar este miedo que se ha instalado tras los últimos resultados es importante encontrar un equilibrio entre la preparación y la aceptación de la incertidumbre. Buscando consejos para superar el miedo a que la teoría de Murphy se instale en la mente de los jugadores, he encontrado cuatro. Planificación y preparación: Identificar posibles problemas, -en defensa, creación y ataque- y desarrollar planes de contingencia para enfrentarlos.

Aceptación de la incertidumbre: Reconocer que no todo está bajo tu control y que es normal que ocurran imprevistos.

Enfoque en soluciones: En lugar de preocuparte por lo que podría salir mal, concentrarse en encontrar soluciones y adaptarte a las circunstancias.

Práctica de la resiliencia: Desarrolla habilidades para recuperarte rápidamente de los contratiempos y aprender de ellos. 

El colchón de puntos permite que se viva sin una alarma exagerada la actual situación, pero es hora de cambiar las tendencias y los duelos ante Osasuna y Las Palmas deben ser un punto de inflexión.

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