Fútbol

La opinión de Toni Ruiz del Villarreal-Mallorca: De la ilusión a la pesadilla en 7 minutos

Robert Navarro conduce el balón.

Robert Navarro conduce el balón. / RCD Mallorca

Toni Ruiz

Toni Ruiz

Arrasate definió, en las horas previas, el enfrentamiento contra el Villarreal como un partido ilusionante. Sin embargo, la ilusión duró apenas siete minutos, el tiempo que tardó el equipo de Marcelino en marcar cuatro goles a los rojillos. Fue una auténtica pesadilla y un temor a encajar una goleada histórica. Más que un partido entre dos equipos que luchaban por un lugar en la zona europea de la clasificación, pareció un duelo desigual entre un líder de la liga y su colista.

La resistencia del Mallorca se desmoronó tras el primer gol, propiciado por un error en la salida de Greiff, y se agravó por un desajuste brutal en todas las líneas. El tridente formado por Álex Baena, Gerard y Yeremi Pino volvió locos a sus marcadores, ofreciendo un recital de fútbol al contraataque. Mientras tanto, Darder y compañía no sabían cómo enfrentar a sus rivales, que no parecían venir de una racha negativa de tres partidos sin ganar en casa.

Si ante el Espanyol Arrasate mencionó que hubo 20 minutos de desconexión que costaron el partido, en esta ocasión la desconexión duró media hora, haciendo el partido completamente imposible de remontar. Si el año 2025 había comenzado con dos derrotas por 3-0, la de anoche superó todas las expectativas. Lo duro de partidos como estos es que tienen segundas partes, y lo único que se puede hacer es maquillar el resultado.

Los cuatro cambios realizados de una tacada tras el descanso -aunque merecían ser once los sustituidos- demuestran el enorme enfado del técnico mallorquinista con su equipo. Volvieron a una defensa de tres centrales para minimizar errores, y se agradece que el Villarreal no quisiera hacer más sangre. Como aspecto positivo, la segunda mitad terminó en empate a cero.

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