El Mallorca se estrella ante el muro del Atlético

Con muy poco y aprovechando un error de garrafal de Pablo Maffeo, el Atlético ha derrotado por la mínima al Real Mallorca (0-1), al que se le ha hecho de noche ante la defensa rojiblanca todo el partido. Los bermellones, faltos de ideas en ataque, acumulan su segunda derrota consecutiva en Liga antes de marcharse al último parón de Liga por compromisos internacionales.

Habló Arrasate en la previa de la idea de jugar con dos delanteros y eso ha hecho ante el Atlético de Madrid, apostando por Muriqi y Larin en punta. Simeone, como estaba previsto, ha realizado varias rotaciones en el once tras el esfuerzo de la Liga de Campeones.

La primera parte del partido ha sido un juego de entrenadores. Aburrido para el espectador, en el que poco o nada pasaba en el campo con un control milimétrico de la posición de cada futbolista. Posesiones interminables entre los defensas, intentando buscar un hueco que no existía en ninguno de los dos equipos y con la idea de correr cero riesgos para evitar contraataques.

Si alguien ha estado algo mejor, en el cómputo global del primer periodo, ha sido el Mallorca. Los bermellones, pecando de cierta lentitud en la creación de la jugada, intentaban mover el balón buscando penetrar el muro rojiblanco, con hasta seis jugadores en la línea de defensa a la hora de replegarse.

Se ha echado en falta mayor atrevimiento con el balón de futbolistas como Robert Navarro o Sergi Darder, aunque el miedo a provocar una contra pesaba más que asumir el riesgo de crear una ocasión.

Samu Costa: "Sabíamos que el partido se decidiría por algún detalle"

Los porteros, meros espectadores, se limitaban a observar el encuentro, que se desarrollaba especialmente en el centro del campo. Con el paso de los minutos, sin embargo, el Mallorca ha empezado a encontrarse más cómodo. La movilidad de los atacantes ha aumentado y han empezado a verse fisuras, especialmente por la banda de Mojica.

Un lanzamiento de falta directa de Samu Costa, fácil de atrapar para Oblak, ha sido lo máximo que ha ocurrido en ataque hasta el minuto 41, cuando Darder ha puesto un gran centro para Larin, cuyo remate de cabeza ha sacado el portero del Atlético demostrando grandes reflejos.

El partido se marchaba al descanso tal y como había empezado, arrancando la segunda parte sin cambios en ambos equipos. O alguno tomaba la decisión de arriesgar o el 0-0 era el marcador más plausible.

El partido se calentó cuando Sánchez Martínez perdonó la segunda tarjeta amarilla a Lenglet por un agarrón cuando Larin, tras controlar y marcharse, se plantaba ya en el área. Los bermellones crecían en el partido a base de impulsos, encontrando huecos por la banda que antes no existían.

Arrasate: "Hay dos errores en el partido, uno del árbitro y otro nuestro"

Pero el Atlético de Madrid necesita entre poco y nada para marcar. Tras un saque de esquina a favor del Mallorca, Oblak ha sacado rápido, buscando la carrera de Giuliano Simeone. Maffeo, de manera incomprensible, ha decidido ir a chocar al delantero cuando lo tenía todo a favor para llevarse la pelota. El hijo del Cholo ha aguantado el envite, cediendo después del balón a Julián Álvarez para que la empujara.

El gol no ha sentado bien a los bermellones, que han visto como Riquelme perdonaba ante Greif tras otro despiste defensivo. La reacción de Arrasate no se ha hecho esperar y ha metido en el campo a Abdón y Chiquinho por Darder y Larin. Por delante, más de veinticinco minutos para intentar, como poco, salvar un punto.

La posesión era cien por cien bermellona, pero no acaban de encontrar la manera de inquietar a Oblak. Con Antonio, Dani y Luna, Arrasate quemaba todos sus cambios. Y Abdón, que siempre tiene una, a punto ha estado de lograr el empate tras un gran pase en largo de Samu Costa, pero Oblak le ha adivinado la intención a la hora de intentar una vaselina.

Pero esa ha sido la última gran ocasión del Mallorca, que suma su segunda derrota consecutiva en Liga y se marcha al parón con la sensación de haber regalado tres puntos a un Atlético al que le ha bastado defender en Son Moix.