OPINIÓN

Cartulina Morada: El nazismo de Son Moix

Desde hace ya muchos años el Mallorca permite que su nombre se relacione con el de los Supporters, ultras violentos que promueven el racismo y la xenofobia

El Mallorca cuenta entre sus aficionados con un grupo ultra, fascista y nazi.

El Mallorca cuenta entre sus aficionados con un grupo ultra, fascista y nazi. / RCDM

Elena García

Elena García

Para arrancar este 2023 me gustaría abrir un melón del que, considero, no se habla lo suficiente, por no decir nada: Nazismo y Real Mallorca compartiendo un mismo titular. El pasado viernes la fachada del bar Atlético Baleares, situado en el barrio de Son Gotleu, amaneció con numerosas pintadas y graffitis de simbología nazi y con la firma de los de siempre: SM’99. Supongo que no descubro a ningún lector, aficionado o no al Mallorca, que cada domingo Son Moix acoge a un grupo de ultras, en ocasiones violentos, que promueven el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte. Supporters Mallorca es, desde hace ya muchos años, la vergüenza de gran parte del mallorquinismo. Vaya por delante que no me gustaría meter a todos sus miembros en el mismo saco, aunque el simple hecho de apoyar o seguir los cánticos de un grupo que promueve este tipo de conductas me resulta revulsivo y asqueroso. Casi tanto como lo es que futbolistas del primer equipo, esos mismos a los que en alguna ocasión han querido reventarles la cara, accedan a fotografiarse con ellos para luego colgar sus instantáneas en las redes con sus caras pixeladas. Valientes cobardes. El Mallorca, como club, debería desvincular su nombre de este grupo de radicales, denunciar sus conductas y evitar su entrada en el estadio. Limpiar la imagen de la entidad y no venderse por cuatro cánticos en las gradas. Sería una buena propuesta para este 2023 que me gustaría acercarle a Sarver. Si de verdad el banquero de Arizona y dueño del Mallorca quiere limpiar su dañada imagen, este sería un buen y primer paso.  

Al Nassr: El empujón de Cristiano Ronaldo al fútbol femenino saudí es ya una realidad

Esta pasada semana Cristiano Ronaldo fue presentado como nuevo jugador del Al Nassr, equipo de la liga de Arabia Saudí. El luso ha firmado el contrato más alto de la historia del fútbol, por el que cobrará 200 millones de euros anuales en sus dos años y medio de contrato como futbolista. Para ponerles en contexto, que sé que no están familiarizados con estas cifras. En los dos minutos que han perdido de su vida leyendo este artículo, el bueno de Cristiano acaba de embolsarse nada más y nada menos que 750 euros. «Es un desafío desarrollar aquí el fútbol para los jóvenes y también para las mujeres, ya que el Al Nassr también tiene equipo femenino», recordó el futbolista durante su presentación acerca de un país, eso no lo dijo, que obvia de manera sistemáticamente los derechos elementales de las mujeres. 

Buen arranque de Onésimo: Da la sensación que la elección del vallisoletano llega algo tarde

Onésimo Sánchez ha arrancado con buen pie su andadura con el Atlético Baleares, aunque está por ver si será capaz de manejarse con la misma soltura por las oficinas del Estadi Balear. Su perfil, amante de la vieja escuela y lejos de las excentricidades, hace recordar a una figura que, hace no tanto, no acabó de la mejor manera en tierras blanquiazules. Da la sensación que la elección del técnico vallisoletano llega algo tarde. Los objetivos eran ambiciosos en el arranque del curso, pero ahora las exigencias no pueden ser las mismas.

Suscríbete para seguir leyendo