Tras el batacazo del pasado fin de semana ante el Granada en Son Moix, el Real Mallorca ya no depende de sí mismo para salvar la categoría. A día de hoy podría ganar sus tres partidos frente a Sevilla, Rayo y Osasuna, pero si Cádiz y Granada hacen lo propio, el conjunto bermellón acompañaría a Levante y Alavés el curso que viene a Segunda División.
Nueve son en estos momentos los puntos que quedan en juego. En el peor de los casos, el equipo de Javier Aguirre podría confirmar su descenso el próximo fin de semana; en el mejor, apalabrar incluso su permanencia. Pero la lógica dice que no será hasta el último partido de LaLiga cuando se conozca el futuro del conjunto bermellón.
Parte de la permanencia del Real Mallorca (32 puntos) pasa en estos momentos por el partido que afrontan este miércoles en el Sánchez Pizjuán (20:30 horas / Gol). A día de hoy el Sevilla es el hueso más duro que tiene. Si logra dar la campanada y sumar al menos un punto, las probabilidades de salvar la categoría crecerán exponencialmente.
Por supuesto, los bermellones están obligados a vencer a Rayo y Osasuna. Los madrileños confirmaron este pasado fin de semana la salvación matemática, por lo que a priori no debería tratarse de un partido complicado. El Sadar, con un Osasuna que ya no puede alcanzar puestos europeos, debería ser otra pera en dulce para los baleares.
El Granada tiene a día de hoy solo dos puntos más que los bermellones (34), sin embargo en caso de finalizar la temporada con los mismos que los rojillos, tienen el golaverage ganado. El calendario de los nazaríes no es fácil, pero tampoco imposible. Los pupilos de Aitor Karanka se miden este martes a un Athletic (20:00 horas) que se encuentra a un solo punto del Villarreal, equipo que marca la plaza destinada a la Conference League. En la jornada 37 se enfrentan al Betis, quien tiene asegurada la Europa League como campeón de Copa y cuyas opciones de meterse en la Champions son efímeras. En el último partido de Liga, reciben al Espanyol de Vicente Moreno, quien seguro ya tendrá apalabrada la permanencia y no se jugará absolutamente nada.
Por su parte, el Cádiz cuenta a día de hoy con 35 puntos, tres más de los que suma el Mallorca. La única noticia positiva para los bermellones es que, en caso de finalizar el campeonato empatados, el conjunto bermellón le tiene ganado el golaverage. Los andaluces tienen que medirse este jueves a una Real Sociedad que se está jugando Europa. Luego reciben al Real Madrid y acaban la temporada con el Alavés, que difícilmente se estará jugando algo. La salvación del Cádiz pasa por sumar al menos un punto en San Sebastián y esperar la derrota del Mallorca en el Pizjuán. A priori, y jugándose la vida, no deberían tener excesivos problemas para ganar sus dos últimos partidos ante el conjunto blanco, que ya solo piensa en la final de la Champions, y ante un Alavés que tiene todas las papeletas de ser ya equipo de Segunda.
