El Real Mallorca parte con una mínima ventaja con respecto a sus rivales en la pelea por la permanencia, en las cuatro jornadas que restan para el final del campeonato. Aunque solo sea porque debe protagonizar uno de los pocos duelos directos que quedan, el próximo sábado ante el Granada, y además con el amparo del público.

El equipo de Javier Aguirre depende de lo que haga, privilegio del que también pueden presumir sus rivales. Y esto es así porque en las cuatro jornadas que restan quedan dos duelos directos, el mencionado Mallorca-Granada del próximo sábado, con aroma a final, y el Alavés-Cádiz de la última jornada, en el supuesto de que los vitorianos lleguen a ese partido con opciones de salvación.

Mallorca y Cádiz suman 32 puntos tras la jornada del pasado domingo, y el Granada 31, por 28 del Alavés, que se agarra a la permanencia tras su victoria sobre el Villarreal. Si los rojillos son capaces de ganar al equipo de Aitor Karanka les aventajaría en cuatro puntos, con nueve por disputar. De ahí la importancia de conseguir los tres puntos. El que lo logre dejará muy tocado a su rival. El Cádiz recibe al Elche en un partido teóricamente fácil para los andaluces, que se miden a un rival que, con 39 puntos, está prácticamente salvado.

En caso de triple empate entre Mallorca, Granada y Cádiz, estos últimos descenderían. Los bermellones solo pierden en el caso de un empate a puntos con el Granada, a la espera del sábado.

Calendario de los equipos implicados en el descenso 22 R.D.