Joan Sastre ya piensa y vive como nuevo jugador del PAOK de Salónica. El lateral del Mallorca, a falta del anuncio por parte de ambos clubes, ha viajado hoy a Salónica para someterse a las pruebas médicas que descarten cualquier tipo de lesión antes de estampar su firma en el contrato que le unirá al club griego hasta final de temporada, en una cesión hasta final de temporada con opción de compra. El futbolista de Porreres ha sido fotografiado a su llegada al aeropuerto posando con la bufanda del conjunto dirigido por Răzvan Lucescu.
Sastre, mallorquinista confeso y criado en la cantera de Son Bibiloni, es otro de los supervivientes de la plantilla que logró el ascenso a Segunda que abandona el club en busca de nuevas oportunidades y minutos. El mismo camino que tomó hace dos semanas Lago Junior, este en dirección al Huesca de Xisco Muñoz. Actualmente, de aquel grupo que comandó Vicente Moreno, tan solo restan en la plantilla Abdón Prats, Manolo Reina, Salva Sevilla y Antonio Raíllo.
El lateral de 24 años, que perdió toda la confianza de Luis García tras el partido en Cádiz donde cometió un penalti en los minutos finales que costó el empate al Mallorca, busca un nuevo giro en su carrera y vivirá su primera experiencia fuera de la isla y vistiendo otros colores que no sean el rojo y negro. Con su adiós, Abdón, Antonio Sánchez y Gayà quedan como los únicos representantes mallorquines dentro de la plantilla.
