Luis García Plaza pronunció un discurso en el que mostró resignación y paciencia para apuntalar la plantilla. El entrenador del Mallorca reconoció que está teniendo problemas, por culpa de las lesiones, para trabajar con el grupo al completo y que sigue esperando la llegada de un delantero y un extremo que eleven el nivel del equipo cuando queda menos de una semana para iniciar la Liga ante el Betis. «Andamos un poco justos porque faltan algunos por venir y los que tenían que estar, no están, como Ángel, Amath o Abdón, que ha tenido covid», dijo en primera instancia antes de ir más allá respecto a los fichajes y a la capacidad económica de la entidad respecto a otros clubes de Primera. «Estamos intentando traerlos y, si llegan esta semana, pues genial, y si es la que viene, un poco peor, pero llegarán, aunque eso no depende de mí. La secretaría técnica con Pablo Ortells está trabajando bien, y hace todo lo posible, pero es que somos el Mallorca. Y ahora meten un fondo de no sé qué y nos toca una ruina comparado con los demás. O empezamos a decir lo que somos o equivocamos a la gente, es que no nos da más, es lo que hay», sentenció.

El técnico, que se mostró contento por «la primera parte» ante el Cagliari, aseguró que «las sensaciones son buenas» tras esta pretemporada. Además, elogió a los canteranos. «Me han dejado muy buena impresión Llabrés, Gayà, Gálvez y Leo Román. No tengo miedo en ponerlos, para eso están», dijo. Y también pidió a la afición que vaya a Son Moix ante el Betis. «A lo mejor tiene cierto malestar. No sé con quién. Pero les necesitamos. Que vengan seis mil u ocho mil, los que sean, y que se dejen la garganta por nosotros», reclamó.