La consellera de Salud del Govern, Patricia Gómez, desmintió ayer de forma rotunda que el Ejecutivo autonómico prohibiera al Real Mallorca celebrar el ascenso a Primera División el pasado jueves 20, tras llegar de Tenerife. Ayer en el Parlament, Gómez reiteró en dos ocasiones que «fue el club quien eligió la opción de celebrar el ascenso el domingo, no hemos prohibido nada».
La consellera relató que mantuvieron una reunión con el Real Mallorca y abordaron diferentes posibilidades, y fue el propio club quien eligió la fórmula finalmente aplicada. De esta forma, Patricia Gómez quiso salir al paso de algunas informaciones que apuntaban que el Govern había impedido una celebración el jueves pasado con la afición, tras el regreso del equipo de Tenerife, donde ascendió a la máxima categoría el día anterior, sin jugar, tras el nuevo tropiezo del Almería, tercer clasificado y único equipo que matemáticamente podía arrebatar la segunda plaza al equipo de Luis García.
Fue a preguntas de la diputada de Vox, Idoia Ribas, que interpeló a la consellera de Salud ayer en el Parlament para saber los motivos por los cuales sí autorizaron la celebración de la Unión Deportiva Ibiza, nuevo equipo de Segunda División, y no la del Mallorca, cuando se debía celebrar en un estadio al aire libre y con medidas de seguridad y control. Gómez insistió que mantuvieron una reunión con la entidad mallorquinista, Delegación del Gobierno y el ayuntamiento de Palma y se le ofrecieron varias opciones. Al final eligieron la celebración el domingo tras el encuentro con el Zaragoza, en lo que supuso el cierre de la temporada en Son Moix. La titular de Salud recordó que «en esta comunidad autónoma hay público en los partidos debido a la responsabilidad de los aficionados y que se cumplen las medidas de seguridad».
