Si a Luis García todavía le quedaba alguna duda de quién debe ocupar el rol de delantero centro titular en el Mallorca en las cinco jornadas que restan para acabar la Liga, el sábado Abdón Prats las despejó de una vez por todas. Partícipe directo de los dos goles ante el Mirandés, el delantero de Artà demostró que está muy por encima de las prestaciones que ha ofrecido hasta la fecha Álvaro Giménez, que con solo un gol desde su llegada en enero todavía no ha justificado su fichaje.
Ya suma ocho goles en Liga Abdón, que con 28 años está logrando el mejor registro goleador de su carrera en la categoría de plata. Pero quedarse tan solo en las estadísticas no ayudaría a entender la importancia de su figura en el sistema táctico del técnico madrileño. Huérfano desde verano el equipo de la figura de un gran goleador, el artanenc ha demostrado tener cogido el punto a Segunda División. Puede que Primera le venga algo grande- el curso pasado se quedó sin marcar-, pero este año su rendimiento es de sobresaliente.
Abdón genera peligro en el área y desahogo fuera de ella. Ante el Mirandés volvió por sus fueros tras un par de meses distraído – dos goles en la segunda vuelta- entre lesiones y suplencias y el equipo lo agradeció. Incansable en la presión, su presencia se nota al atacar y tanto los interiores como los extremos del Mallorca saben que pueden combinar con él tanto en corto como en largo.
El partido era vital para el Mallorca. La victoria era innegociable después de dos derrotas seguidas. Y Abdón se ha acostumbrado a estar presente los últimos años a estar en los días importantes. Tuvo el primero tras un gran centro de Sastre, pero se equivocó a puerta vacía al querer rematar con el pie un balón franco para la cabeza. Se lamentaba en silencio durante los siguientes minutos, pero todo cambiaría en el tramo final de la primera parte.
Toda la tarde se podría haber ido al traste si el tobillo que se le dobló tras un choque no hubiese aguantado. Tres minutos fuera con vendajes comprensivos y una pastilla para amortiguar el dolor para poco después, tirando de intuición de killer, aprovechar un mal rechace de Berrocal para orientarse el balón y disparar con potencia. Primer gol y celebración de rabia y pasión.
Tras el paso por vestuarios en cinco minutos dejó su segunda aportación para el encuentro, esta vez con la impagable colaboración de Amath, su mejor socio en ataque esta temporada. Recuperación en el centro del campo y dos para dos. El senegalés fijó la marca de lo dos centrales y Abdón se desmarcó, fregando el fuera de juego. Su disparo lo repelió Lizoain, pero el balón pegó en Vivian, que se había lanzando al suelo para evitar el primer remate, colándose en la portería.
Faltan cinco jornadas de Liga y, si no hay lesión que lo impida, Abdón es el nueve que debe jugar sí o sí hasta que finalice el campeonato. Con su renovación todavía en el aire, el de Artà continúa haciendo méritos para seguir en el club.
