El Mallorca tiene ante sí, otra jornada más, una inmejorable oportunidad de alejarse a muchos kilómetros de distancia del tercero en discordia por el ascenso directo, el Almería. Un triunfo bermellón esta noche frente al Fuenlabrada (21h/Vamos Movistar), su bestia negra este curso y que ya les derrotó en la primera vuelta, les colocaría de nuevo líderes con 64 puntos, aventajando en siete al conjunto indálico a falta de solo 33 por jugarse. Pero no será fácil. Para empezar, lo harán desarmados en el centro del campo. Galarreta, lesionado de nuevo, no viaja, y Antonio Sánchez, que solo ha completado una sesión de entrenamiento con el grupo esta semana por un golpe en el brazo, solo jugará en caso de extrema necesidad.
Sea como sea, la victoria es imperiosa para el Mallorca en el duelo en el Fernando Torres –primero de los tres partidos que los bermellones afrontarán en los próximos seis días–. Puede que los rivales le estén otorgando vidas extra con tropiezos jornada sí y jornada también, pero solo un punto de los últimos seis es un bagaje pobre para un equipo que ha bajado notablemente sus credenciales en el último mes de competición.
Las bajas en ambos bandos son las grandes protagonistas. Más allá de Galarreta y Antonio, el Mallorca no podrá contar con Amath, Valjent, Trajkovski y Lago Junior, esto tres últimos convocados con su selección. Y por ello, Luis García deberá diseñar un once de urgencia, metiendo mano a la sala de máquinas y calibrando qué zonas tocar para no acumular kilómetros de más en una semana agotadora.
Russo, con cuatro tarjetas amarillas, será el acompañante de Raíllo en la zaga. Sastre es fijo en el flanco diestro. Y quien tiene números de regresar un més después es Oliván, tras recuperarse de su lesión. Su posible entrada en el once podría provocar que Cufré adelante su posición para blindar la banda izquierda, aunque Mollejo también tiene opciones.
Russo ocupará el hueco de Valjent en el centro de la zaga y Mboula el de Antonio en el extremo derecho
Que Baba no tuviera que viajar con Ghana alivia los dolores de cabeza en el centro del campo, donde formará con Salva Sevilla, que necesitará dosificarse, pensando en el partido del jueves ante el Leganés. En la derecha, Mboula, el futbolista con mayor desborde de la plantilla, apunta a titular siete jornadas después.
Arriba habrá que esperar quién será el acompañante de Dani Rodríguez, si Abdón o Álvaro Giménez. Incluso no es descartable, teniendo en cuenta la mala racha que atraviesa el de Betanzos, que ambos formen en el once dibujando un 4-4-2 al uso y sea el gallego quien aguarde su oportunidad en la banda.
En la acera local las aguas no andan menos revueltas. Navegando en tierra de nadie en la clasificación, un ex del Mallorca como José Luis Oltra deberá tirar de imaginación para alinear un once de garantías, ya que cuenta con las bajas de Iban, Pol, Franchu, Aguado, Kanté y Sekou. Pese a todo, vienen de ganar a todo un coloso como el Leganés a domicilio (0-2) y quieren alargar su racha en casa, su gran enemigo este curso, donde no suman de tres desde septiembre.
Galarreta no se viste de corto desde el encuentro ante el Almería.
El rival
Si hay una estadística que corre a favor del Mallorca son los números del Fuenlabrada en casa. Junto al Sabadell es el equipo que tiene el peor registro como local. Los madrileños tan solo han logrado dos victorias en el estadio Fernando Torres en lo que va de curso, ante el Lugo en la primera jornada (2-0) y ante el Albacete en la tercera (1-0), allá por el mes de septiembre.
