Andy Kohlberg tiene mucho trabajo pendiente. El presidente del Mallorca, que aterrizó en la isla a mediados de la pasada semana, tiene cubierta su agenda para los próximos quince días, el tiempo que estará aquí, antes de emprender viaje de regreso a su país el 4 de abril.

El presidente del Mallorca, que no venía a la isla desde el pasado 7 de octubre, ha visto cómo se le ha acumulado el trabajo después de que no haya podido venir a causa de la pandemia de coronavirus. De hecho, tenía previsto volver por Navidad, pero le fue imposible.

Desde que ha llegado no ha parado. Sus reuniones con el CEO de negocios Alfonso Díaz han pasado de ser semanales y telemáticas con el Atlántico por en medio, a diarias y presenciales. Con Díaz contempla los distintos escenarios posibles para la próxima temporada, que variarán de forma ostensible en el caso de que el club milite en Primera División o permanezca en Segunda. También se ha visto las caras con el director deportivo Pablo Ortells, aunque Kohlberg no entra en la estrategia deportiva, como la planificación de la plantilla o el capítulo de las renovaciones, la última la de Salva Sevilla el pasado lunes.

Viajará con el equipo para los partidos ante el Fuenlabrada y Las Palmas y verá el día 1 el duelo ante el Leganés

El máximo mandatario también tiene previstas diferentes reuniones con patrocinadores y con los distintos departamentos del club.

Además, Kohlberg presenciará en directo los tres partidos que debe jugar el equipo con su estancia en Mallorca. Así, el próximo lunes viajará a Fuenlabrada en el primero de los tres partidos que debe disputar el grupo de Luis García en la Semana Santa. El jueves, como ya hizo ante el Oviedo el sábado, presenciará desde el palco el encuentro ante el Leganés; y, el 4 de abril, tras volar a Las Palmas, emprenderá viaje de regreso a Estados Unidos.