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El Mallorca, mejor visitante de Segunda, se pone a prueba ante el único local invicto

El Sporting de Gijón, rival de los bermellones el domingo, presume de su fiabilidad en El Molinón

A la izquierda, Djurjevic festeja un gol con el Sporting. A la derecha, Amath celebra un tanto con el Mallorca.

El Mallorca presume de ser el mejor visitante de la Segunda División, con mucha diferencia, pero este domingo tiene un reto de los que invita a salir al campo con el cuchillo entre los dientes. El Sporting de Gijón es el único equipo de toda la categoría que no ha perdido como local y, de hecho, su gran fortaleza para seguir alimentando sus opciones de ascenso a Primera División, aunque sea a través del play-off, reside en lo que suma en El Molinón. Ha ganado ocho partidos y ha empatado seis, o lo que es lo mismo, ha obtenido treinta puntos, una cifra que solo superan, aunque hayan caído en su feudo, el Leganés (37) y el Espanyol (32).

Será el más difícil todavía para los de Luis García Plaza, que ya han demostrando fiabilidad para romper rachas positivas de los adversarios. Sin embargo, esta es de las complicadas de verdad. Eso sí, también hay un dato a tener en cuenta. Los asturianos han logrado la mayoría de sus triunfos frente a rivales de la parte media de la tabla. Sin ir más lejos, los adversarios mejor clasificados que han doblado las rodillas en Gijón son la Ponferradina (2-1), que es séptima; el Girona (2-0), que es noveno; y el Málaga (1-0), que es décimo. Con los grandes, no se ha medido todavía con el Almería, han sufrido. No pudieron vencer al Espanyol (1-1), ni tampoco al Leganés (1-1) ni Rayo Vallecano (1-1), aunque, todo depende del punto de vista, tampoco ha salido derrotados antes estos ‘gallitos’ de la categoría.

Los de David Gallego llegan a este partido tras una de sus mejores rachas del curso, sumando seis encuentros consecutivos sin conocer la derrota por segunda vez esta temporada, en los que ha firmado tres victorias (Logroñés, Málaga y Albacete) y tres empates (Cartagena, Espanyol y Ponferradina). El Mallorca sabe que tiene otra oportunidad para dar un golpe sobre la mesa y, en caso de sumar un triunfo, dejar a quince puntos más golaverage a los de David Gallego, una diferencia que sería abismal a falta de trece jornadas para el final.

Los bermellones, que llegan al choque después de tres victorias seguidas, deben aprovecharse que les gusta viajar. Sonríen cuando se acercan al aeropuerto y se suben a un avión para vivir una nueva aventura, de esas que van acompañadas de mariposas en el estómago. Y, de momento, se lo está pasando muy bien porque su equipaje regresa lleno de regalos para la afición.

Acumulan la friolera de treinta y un puntos, con nueve triunfos, cuatro empates y ninguna derrota. Y un dato demoledor. Solo han encajado cuatro tantos en sus trece encuentros lejos de Son Moix. Y eso que ya han jugado en escenarios de mucho prestigio, como el RCDE Stadium del Espanyol (0-0), Butarque del Leganés (0-1), Juegos Mediterráneos del Almería (0-1) y Vallecas del Rayo (1-3), todos ellos ubicados justo por detrás en la tabla. Precisamente solo falta este enfrentamiento ante el Sporting para haber visitado a todos los de arriba. Y qué mejor que hacerlo cerrando el circulo con otra alegría.

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