Luis García está enamorado de su equipo. Está enamorado de Baba, de Salva Sevilla, de Valjent o de Oliván. Da igual al jugador que le nombres, porque el técnico del Real Mallorca tiene elogios para todos. Ayer, por ejemplo, tras la victoria frente al Almería, dijo del centrocampista ghanés que es un «futbolista tremendo». «Es que es un pulpo, llega a todos lados y ha estado inmenso. Tenía ganas de verle a este nivel porque es un valor claro de este club», añadió.

Sobre el almeriense, por ejemplo, tampoco se quedó corto: «Con la edad que tiene, se ha cascado un partidazo. Es todo un ejemplo. Quizás los partidos se le puedan hacer un poco largos, pero hay que ir regulándole. Es un fenómeno y cuando le he visto ante los defensas sabía que le iba a pegar un toque con el que iba a dejarles secos».

Y así, sin ocultar su júbilo, Luis García prosiguió: «¡Oye! Pero que esto es solo una victoria. Que lo hemos hecho muy bien y son tres puntos muy buenos, pero ni tras la derrota frente al Espanyol había que hacer un drama, ni con este triunfo hay que lanzar las campanas al vuelo. Llevamos solo cinco partidos de la segunda vuelta y esto va a ser muy largo. Lo único que sí cabe destacar es que ya nos hemos enfrentado a casi todos los equipos de la parte de arriba, pero estos tres puntos valen exactamente lo mismo que los del próximo sábado ante el Logroñés».

Cuestionado por Ruíz de Galarreta, quien tuvo que abandonar el césped lesionado, el técnico bermellón desveló que el futbolista «que estaba entre algodones» no se trataba del eibarrés. «Lo de Íñigo es una lástima. Es algo muscular y no sabemos para cuánto tiempo tendrá. Lo mismo que Oliván, que ha terminado el partido tocado y seguramente tenga algo. Son dos más que probables bajas para el próximo encuentro», desveló.

Sobre la charla que mantuvo con el colegiado y el técnico del Almería al final del partido, Luis García explicó que se agradece poder hablar con los árbitros «pase lo que pase» durante el encuentro. «Hay que normalizar el fútbol con los árbitros y creo que es algo muy sencillo cuando te encuentras gente como la de hoy», zanjó.