Inapelable la victoria del Mallorca en Vallecas ante un rival que a final de temporada ha de luchar por el ascenso. El juego del equipo no fue brillante, pero qué más da cuando la efectividad ronda el cien por cien. No se puede conseguir más en veinte minutos que lo logrado ayer por el Mallorca, tres goles, dos de ellos de bellísima factura
Empezaba a preocupar la adversa trayectoria del equipo de Luis García y más de uno ya se empezaba a preguntar si la crisis, porque era una crisis, era temporal o había llegado para quedarse. Ayer se despejaron muchas dudas, y las pocas que quedan deben ratificarse en Palma el próximo sábado ante un Girona que ayer tumbó al líder Espanyol. Son Moix es la asignatura pendiente del equipo y los catalanes serán una buena piedra de toque.
Mención aparte merece Abdón Prats, que atraviesa por el momento más dulce de su carrera. Le entra todo. En el primer balón que toca da un pase milimétrico a Amath; en el segundo bate la portería del Rayo y en el de Salva Sevilla es objeto de la falta previa. ¿Quién da más? El club busca un delantero, pero el que llegue, si lo hace, deberá esperar su turno.
