«Sé que podría estar jugando en Segunda, por eso he venido al Mallorca, para subir». Estas palabras, pronunciadas hace poco menos de tres años en una entrevista con DIARIO de MALLORCA, fueron toda una declaración de intención. Pero lo que jamás soñó Aridai Cabrera (Las Palmas, 1988) es que se quedaría corto en sus ilusiones. El extremo, que forma parte de la ya legendaria plantilla que logró el doble ascenso, de Segunda B a Primera vestido de bermellón, regresa a la isla que ha visto su mejor fútbol. Mañana lucirá los colores amarillos del equipo de su tierra natal, aunque no apunta a titular, pero a buen seguro que pisar Son Moix le hace sentir muy especial.

El futbolista, que ya había militado en una primera etapa en las categorías inferiores del Mallorca, aterrizó en la temporada 2017/2018 procedente de la Cultural Leonesa, para marcar las diferencias en la categoría de bronce. Y no pudo disfrutar de un mejor debut ya que fue titular y el autor de uno de los goles y una asistencia en el derbi ante el Atlético Baleares (3-2).

A partir de ahí se hizo un hueco entre los elegidos por el técnico Vicente Moreno, tanto en la segunda vuelta de aquel curso, como en Segunda División -58 partidos y 12 dianas entre Liga y Copa-, que le sirvieron para pisar la Primera División. En la elite ya fue otra historia y el preparador valenciano apenas contó con sus servicios, por lo que se vio obligado a hacer las maletas en el mercado invernal.

, dijo entonces.

No le están saliendo las cosas como pretendía -Pepe Mel solo le ha alineado cuatro partidos como titular-, pero al menos este domingo se dará un baño de nostalgia.