El Mallorca despide 2020 en puestos de ascenso directo porque ha hecho muy bien las cosas, incluso mejor que las expectativas más optimistas, por lo que lo más inteligente sería no tocar nada de lo que ya funciona. Luis García ha dado con la tecla muy rápido en un grupo que se conoce desde hace ya varios años y, los que han llegado, están aportando, en general. Sin embargo, soy de los que sigue creyendo que este equipo todavía sería más competitivo con un delantero que marque las diferencias, una circunstancia que podría arreglarse en este mercado invernal. Quizá este jugador es Abdón y no haría falta hacerlo, porque su último mes ha sido sublime, pero mejor no quedarse con la duda y tratar de dar más herramientas al entrenador. Queda el tramo más duro.
