Las aspiraciones entre Mallorca y Sporting tras la derrota del Espanyol dejaron al Leganés como el gran beneficiado de la decimotercera jornada.
El Mallorca se quedó sin marcar y, por lo tanto, sin asaltar la posición de líder que el Espanyol había dejado temblando tras su derrota.
Y el cero-cero en el Visit Mallorca Estadi lo único que confirma es que la temporada, en la zona alta de la tabla, va a ser divertida, intensa y cambiante a medida que avance.
No hubo goles, pero pudo haberlos. Sí hubo intención, pero se quedó corta. Y lo que sí hubo fue un Mallorca que repite una de las máximas de la presente campaña, y es que si no puede ganar, por lo menos empata y eso hace que acumule ya doce jornadas consecutivas sin conocer la derrota.
El ‘pero’ de turno vuelve a ser el habitual: no hay un ‘killer’ que en el momento puntual la enchufe y esa carencia necesita un remedio.
Dicho esto, el Sporting, que llegó con varias bajas fue superior por momentos, pero sin pegada, y la combinación de los dos equipos dio con el empate a cero que no conforma ni a unos ni a otros, pero que tampoco deja mal sabor de boca.
Ahora, toca recuperarse, mirarse al espejo, subirse al avión e ir camino de otro partido contra el Cartagena y con rotaciones en la alineación, seguro.
