Ante este panorama, el Espanyol, acuciado como el Mallorca por el paso de los días -la pretemporada empieza para los rojillos el próximo 10 de agosto- habría empezado a mover ficha y plantearse renegociar las condiciones del acuerdo con Moreno, con el que se ha comprometido, a falta de la firma, para las tres próximas temporadas. El club de Cornellà El Prat empieza a hacerse a la idea de que si quiere contar con los servicios del técnico de Massanasa deberá pasar por caja ante la negativa rontunda del Mallorca a negociar una rebaja de la claúsula. Por eso, una de las pocas opciones que le quedan es reducir la cuantía de la ficha del entrenador para compensar de alguna manera lo que ahora parece un pago inevitable para que aterrice en el banquillo espanyolista. Esta opción requiere, lógicamente, el visto bueno de Moreno, porque afectaría directamente a su bolsillo.
Fuentes próximas a Promosport, agencia de representación de Moreno, apuntan a que la situación es límite porque el tiempo apremia. Se confía en que esta semana se encuentre una solución a un tema que, o se arregla, o se rompe definitivamente. En este caso, poco probable, Moreno seguiría como inquilino del banquillo de Son Moix. En cualquier caso, esta es una situación que ahora no se contempla en absoluto en el Mallorca porque la relación entre el club y el técnico ha quedado muy deteriorada. La pérdida de confianza entre ambas partes es evidente. Kohlberg ha hecho saber a su entorno más próximo su decepción con el entrenador, porque considera que los contratos están para cumplirse. Además, sospechan que el acuerdo de Moreno con el Espanyol se produjo en plena pelea del equipo por la permanencia.
El Mallorca está relativamente tranquilo porque, en el peor de los casos, Moreno tiene contrato en vigor. Pero la planificación de la temporada, ya en marcha, se está llevando a cabo sin la opinión del valenciano, que está sufriendo una brutal pérdida de imagen.
Campaña de abonados
Un total de 878 abonados renovaron su carnet del Real Mallorca para la próxima temporada, en la que el club militará en Segunda División. Los socios que quieran renovar su carnet con la garantía de que se les guarda su asiento, tienen de plazo hasta el próximo 24 de agosto. A partir del 1 de septiembre se abre el plazo para las nuevas altas. En un principio, los abonados abonarán el 25 por ciento de la totalidad del carnet, a la espera de saber cuándo se podrá acudir a los estadios.