Los jugadores del Mallorca, así como también el cuerpo técnico, se someterán entre hoy y mañana, de forma escalonada, al test de la Covid-19, por lo que darán así el primer paso para regresar al trabajo en la ciudad deportiva Antonio Asensio de forma inminente. Este es un requisito imprescindible para que puedan ejercitarse con garantías después de que se hayan conocido los resultados.

Los jugadores se turnarán para coincidir lo menos posible con sus compañeros a la hora de someterse a un test elaborado por un laboratorio contratado por LaLiga y que deben pasar todos los futbolistas de Primera División.

Salvo contratiempo, todo apunta a que el viernes o el sábado, todavía no está decidido, los jugadores iniciarán sus sesiones en Son Bibiloni. Así, en esta primera fase de entrenamientos los futbolistas realizarán su trabajo de forma individual asistidos por el menor número de técnicos posible, tras acceder a las instalaciones de la ciudad deportiva en sus vehículos particulares de forma escalonada, con guantes y mascarilla, y vestidos desde casa con la ropa de entrenamiento para no usar el vestuario. Atendiendo a la norma de respetar la denominada "distancia social" de dos metros, los técnicos segmentarán los campos de fútbol en diferentes zonas de trabajo.

Una vez finalizada la sesión, los futbolistas se retirarán directamente a sus vehículos sin pasar por los vestuarios, después de que les sea entregada una bolsa biodegradable que contendrá su indumentaria de entrenamiento del día siguiente y que servirá para entregar la usada en la última sesión. Antes del inicio de los entrenamientos, las instalaciones serán desinfectadas por nebulización y pulverización.