Alfonso Díaz, nuevo director ejecutivo del Real Mallorca, no ocultó este martes "el varapalo económico" que supondrá para el club la disputa del partido ante el Barcelona de este sábado a puerta cerrada por la crisis del coronavirus. "Al final tenemos tres partidos fuertes, con los tres equipos más grandes de la Liga, y evidentemente es un varapalo, pero no podemos hacer otra cosa. Hay que seguir luchando por conseguir los objetivos económicos que nos hemos impuesto como club", indicó el nuevo directivo de la entidad rojilla.

Díaz, que compareció ante lo medios minutos después de recibir la "confirmación oficial por parte de LaLiga", admitió que, desde el club llevan "ya unos días trabajando con las entidades pertinentes en temas de protocolo interno para tomar las medidas necesarias". "Es algo extraordinario que excede de nuestras competencias, no podemos decidir,es un tema de sanidad pública", señaló.

El director ejecutivo apuntó que explicarán el procedimiento para que "todos los aficionados recuperen el dinero" invertido en las entradas, pero que "el palo para el club es muy grande". "Era un partido ilusionante, después de tantos años teniendo ganas de tener encuentros de esta entidad, pero al final hay que tratar de conseguir los tres puntos igual que si estuviese el campo lleno", señaló.

Sobre la posibilidad de aplazar el partido, en lugar de jugarlo a puerta cerrada, Díaz señaló que parece una opción complicada: "Hay que verlo. Luego hay una Eurocopa, no sé cuánto se puede aplazar, qué fechas hay. Sabemos que el calendario a nivel deportivo suele ser muy estrecho".

"Tenemos que asentar el protocolo, ver cómo implementarlo y enterarnos en profundidad de cuáles son las restricciones. Hay que ver qué restricciones nos imponen desde Sanidad. De momento son dos partidos, a partir de ahí tendrá que comunicarlo el Gobierno y hacerlo oficial si van a seguir con esta medida o no", zanjó.

Díaz, que fue nombrado nuevo director ejecutivo del club tras la destitución de Maheta Molango como consejero delegado, se refirió también al despido del CEO. "Al final desgraciadamente ocurrió que tuvo que salir Maheta Molango, que al final ha dirigido el club y ha conseguido el objetivo de llevar al club a Primera División y a partir de ahí los accionistas han tomado la decisión de que internamente esté yo de director ejecutivo y lo asumo con naturalidad y profesionalidad. No puedo decir nada, no sé nada al respecto de las decisiones que tomará el club en ese sentido a partir de ahora", señaló.