El Mallorca vuelve a contar con tan solo un lateral izquierdo en plantilla. Ayer se confirmaron los peores presagios sobre la lesión de Leonardo Koutris. El lateral griego sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda y el tiempo estimado de baja es de seis meses, por lo que el jugador, cedido por el Olympiakos hasta el 30 de junio, no volverá a jugar con la camiseta del Mallorca este curso.

En este nuevo escenario, el club bermellón está valorando la posibilidad de acudir al mercado y fichar a un jugador para suplirle, siempre que acepte firmar la baja federativa, quedarse con lo que tiene actualmente o aprovechar el hueco que dejará para reforzar otro puesto de la plantilla.

Las opciones con las que cuenta la dirección deportiva no son muchas. Al estar cerrado el mercado, el club puede fichar a un jugador que en estos momentos esté sin equipo, negociar una cesión -como se hizo con Andreu Fontás en la temporada 2012/2013, cuando llegó en octubre sustituyendo al lesionado Joao Victor-, o un traspaso.

Como última opción, la entidad puede recurrir a abonar la cláusula de rescisión-como hizo el Barcelona con Martin Braithwaite, del Leganés- correspondiente del jugador que quieran incorporar, aunque esta parece la más remota por las reducidas posibilidades económicas del club.

A excepción de los jugadores que están en paro, el resto de opciones lleven implícitas la obligación de que el futbolista juegue en España, ya que el artículo 124 del Reglamento General impide que se hagan operaciones que incluyan un transfer internacional fuera de las dos ventanas de fichajes.

El Mallorca ya acudió al mercado de jugadores libres para hacerse con los servicios del surcoreano Ki Sung-Yueng, con el riesgo que conlleva adquirir a futbolistas con bajo ritmo de juego.

Por otra parte, el Mallorca también baraja la posibilidad de no realizar ninguna incorporación y continuar hasta final de temporada únicamente con Lumor como lateral izquierdo, recurriendo a Gámez o Sastre si fuera necesario en ausencia del ghanés.

Además, la dirección deportiva podría reforzar el equipo en otra parcela distinta a la del lateral, como puede ser las posiciones de extremo o de un delantero que pueda competir con Cucho y Budimir, movimientos que ya se intentaron en el pasado mercado de fichajes de invierno, pero que no llegaron a fructificar.