El presidente del Mallorca Andy Köhlberg se reunió ayer con los representantes de la Unió de Penyes Mallorquinistas y el Moviment Mallorquinista con la intención de conocer de primera mano sus necesidades. El estadounidense, que estuvo acompañado en todo momento por el director financiero Alfonso Díaz y el jefe del área de taquillas y abonados, Román Albarrán, quiere entablar una nueva relación con los peñistas tras la etapa que se abre con la salida de Molango.

El encuentro con ambas asociaciones se celebró por separado en Son Moix. La Unió de Penyes Mallorquinistes, que aglutina a 39 peñas y más de cuatro mil abonados y que preside Toni Vallespir, trasladó sus inquietudes al dirigente, como las organizaciones de viajes o actividades de animación en el estadio. Igual sucedió con el Moviment Mallorquinista, presidido por Sebastià Oliver, que le reclamó más apoyo de la entidad en sus numerosas iniciativas.