A lo mejor hace bien Moreno en no calificar de final el partido de mañana en Balaídos, al contrario que sus jugadores, tal vez con la intención de no meterles más presión de la que ya tienen. Pero la realidad es la que es y lo cierto es que una derrota ante el Celta de Aspas dejará al equipo rojillo en posiciones de descenso. Urge cuanto antes romper la nefasta racha de siete derrotas a domicilio, aunque sea en forma de empate, porque la psicosis empieza a hacer mella. Estar fuera del descenso siempre es importante. Está en manos del equipo de que no entren.
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Opinión