Dijo en su día John Lennon que 'la vida es lo que va pasando mientras tú haces otros planes', y si trasladamos la frase al fútbol y especialmente a este Real Mallorca podríamos decir que 'la Liga es lo que pasa mientras el Mallorca hace otros planes'.
Y en la búsqueda de esos planes lo que sí hace el equipo bermellón es cometer penaltis inocentes y rematar a los postes partido tras partido.
Los penaltis en contra ya son cinco y solo el de Baba ante el Athletic en Son Moix parace discutible mientras que los demás son todos de una inocencia absoluta, además de evitables.
Y por si faltaba algo, la puntería de los jugadores del Mallorca es infalible porque a mí me sigue pareciendo más difícil darle al palo que tirarla entre los tres palos y que sea lo que el acierto o el portero contario quieran.
El poste de Budimir con el resultado en ese momento de empate a cero es una situación que se ha repetido ya cinco veces de los seis postes 'conseguidos'.
Y lo del penalti no ofrece dudas; Lago Junior le da una patada a Pina cuando éste está de espaldas a portería y sin posibilidad de contactar con el balón.
Dicho esto, los planes, como los de Lennon, se van al traste y el próximo partido ante el Espanyol ya adquiere tintes de dramatismo para los dos equipos, no solo para el Mallorca, porque el Espanyol también está como está.