El Real Mallorca es uno de los equipos que mejor posicionado llega a la fase decisiva del campeonato entre los aspirantes a meterse en el play-off de ascenso a Primera. En un análisis de los cinco últimos partidos, el equipo mallorquinista, que el domingo ascendió a la quinta plaza, ocupa la cuarta posición en una hipotética clasificación, con diez puntos, producto de tres victorias -una ante el Reus en partido no disputado- un empate y una derrota. En total diez puntos que le han catapultado a la quinta posición con 55 puntos, a seis de la segunda, plaza de ascenso directo, propiedad del Albacete.
El equipo que mejor llega a este final de temporada es, curiosamente, uno que no ocupa plaza de play-off de ascenso, el Sporting de Gijón, que ha sumado trece de los últimos quince puntos en juego. Le siguen el Albacete, con once, el Mallorca y el indiscutible líder Osasuna con diez. A estos dos equipos se suma el Elche, que llega pletórico al tramo final, aunque ha llegado tarde para soñar con la posibilidad del ascenso.
En el extremo opuesto, el Málaga, Granada y Deportivo van a la baja, al menos por su tendencia en estos últimos cinco partidos. El conjunto malagueño, que ha cambiado de inquilino en el banquillo -Víctor Sánchez del Amo sustituye López Muñiz-, solo ha sumado seis puntos de los últimos quince. Su sorprendente derrota en La Rosaleda ante el Rayo Majadahonda ha acabado con la paciencia del jeque, que ha ordenado el cambio de entrenador. De luchar por las plazas de ascenso directo, el conjunto malacitano se mantiene por los pelos en zona de play-off.
El Granada es otro de los equipos que se ha caído en las últimas semanas. Al igual que el Málaga, solo contabiliza cinco puntos en las últimas cinco jornadas, lo que le ha descabalgado de las plazas de ascenso directo. Ahora es tercero, con los mismo puntos que el Albacete, segundo.
El Deportivo es el tercer equipo que ha dado un paso atrás. Y, al igual que en el Málaga, han aflorado los nervios y el club ha decidido el cambio de entrenador, el mallorquín Pep Lluís Martí -que debutó con derrota ante el líder- por Natxo González. El conjunto gallego, que el 26 de mayo recibirá al Mallorca en Riazor, ha salido, después de muchas jornadas, de las plazas de play-off.
El Mallorca debe disputar cuatro de sus ocho partidos en Son Moix, donde este 2019 solo ha cedido un empate. Rayo Majadahonda, el próximo sábado, Sporting, Almería y Granada son los rivales que deben pasar por Palma. El más asequible, a priori, es el conjunto madrileño, y muy peligrosos los otros tres. En cualquier caso, las opciones de que el equipo se clasifique para el play-off pasan por ganar sus partidos ante su afición. Si hiciera pleno de victorias, sumaría 67 puntos, una cifra que le dejaría clasificado salvo sorpresa mayúscula.
Los desplazamientos son a Málaga, Nàstic, Deportivo y Extremadura. Dos muy complicados -Málaga y Deportivo- y los otros dos más asequibles. El conjunto catalán está con pie y medio en Segunda B y el 12 de mayo, fecha del partido, puede estarlo de forma matemática. Y el Extremadura, en el cierre de la competición, o estará salvado o se lo jugará todo a una carta, lo que supondría una dificultad añadida para un Mallorca que sufre en exceso cuando juega lejos de Palma.
Penya Arrabal Celebró la fiesta de temporada
La Penya Arrabal, una de las más carismáticas del mallorquinismo, celebró ayer por todo lo alto su fiesta anual de temporada. Al acto de la penya presidida por el incombustible Toni Tatxa, asistió una amplia representación de la plantilla, como el capitán Xisco Campos, Salva Sevilla y Antonio Raíllo, entre otros, así como el cuerpo técnico encabezado por Vicente Moreno y Dani Pendín. Junto a Tatxa estuvieron también el presidente de la Federación Balear Miquel Bestard; el consejero delegado del Mallorca Maheta Molango y el presidente de la Unió d'Penyes, Toni Vallespir.
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