"Budimir, Budimir", entonó varias veces las afición durante el encuentro ante el Oviedo. No marcó, pero tampoco le hizo falta. El delantero croata, aunque nacido en Zenica, que actualmente pertenece a Bosnia, está de moda. Ha marcado tres goles, pero lo que está enamorando es su entrega y calidad al servicio del equipo. Suena a tópico, pero no lo es. Hasta el técnico, nada amante de elogiar individualmente, se ha dado cuenta de cómo ha calado entre el mallorquinismo. "Es que se lo deja todo. Tiene muchas cualidades y provoca que sucedan muchas cosas. Me alegra que la gente premie su trabajo", comentó Moreno el sábado.
Budimir, que llegó en enero cedido por el Crotone italiano, ha entrado con buen pie en el vestuario de Son Bibiloni. "Es un ejemplo de profesionalidad", cuentan desde el club. Quizá influido por la cultura futbolística italiana, es de los que se queda en el gimnasio tras cada sesión, aunque no es el único. No está entre los más extrovertidos del grupo, pero es de los que casi siempre sonríe. Pasa mucho tiempo con el ahora lesionado Stojiljkovic, pero ni mucho menos se ha aislado del resto.
Nada más aterrizar en la isla se preocupó de encontrar un profesor de español para integrarse lo antes posible, por mucho que lo entienda bastante por sus años en Italia, y mostró su curiosidad acerca de diversos aspectos de la isla. "No solo quería saber dónde vivir, si no qué lugares visitar", explican. No es de los que se pasa horas con una consola de videojuegos, como muchos de sus compañeros. Ni siquiera tiene cuentas en las redes sociales. Pasa de ellas. Es estudiante de Economía a distancia, a través de la Universidad de Zagreb, ciudad a la que llegó con seis meses tras huir de la guerra para instalarse en casa de sus abuelos.
Potente con sus 1,90 metros, pero ágil por su constitución física -no alcanza los 80 kilos-, está demostrando talento e inteligencia con el balón, un buen juego de espaldas y capacidad de desmarque en ruptura, más allá de su sacrificio. Estas virtudes están conquistando a la hinchada. "Le he dicho que tenemos que hacer una colecta para pagar su opción de compra", comentó el popular seguidor 'Es Berro' tras mostrarle una pancarta en la que es el protagonista. El 'Cisne de Zenica' le apodaron en Crotone, donde lideró a su equipo para el ascenso a Primera. En Mallorca sueña con repetir la gesta. Aquí ya le empiezan a llamar así. Si se convierte en ídolo será que lo ha conseguido.
El 'Cisne de Zenica' ha calado entre los aficionados del Mallorca
Budimir ya se ha convertido en uno de los jugadores más demandados por los aficionados del Mallorca para firmar autógrafos y fotografiarse. Sin ir más lejos, el pasado domingo atendió con una sonrisa a algunos integrantes de la Penya 'Es Berro', que le mostraron la pancarta que llevaron ante el Elche.
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