Tarde de contrastes en el Carlos Tartiere. El Real Mallorca, pero espabiló en el segundo periodo para rascar un trabajado punto ante el Oviedo de Anquela (1-1).

Las cuentas del Mallorca empiezan a flaquear. El conjunto bermellón suma un único triunfo en los ocho últimos encuentros y eleva a cuatro las jornadas que lleva sin hacerse con un triunfo. Los rojillos pierden fuelle en la tabla, pese a seguir enganchados a la parte alta.

Un Mallorca desconocido se presentó ayer en tierras ovetenses. Despistado, errático y con falta de chispa, distó mucho del equipo de otras ocasiones. Pese al mal comienzo de los bermellones, Aridai llegó a disponer de hasta dos claras ocasiones, en los últimos minutos del encuentro, para darle la vuelta al marcador, pero el canario erró solo, ante el portero. Cinco son ya los partidos (Alcorcón, Albacete, Lugo, Las Palmas y Oviedo) en los que el Mallorca encaja durante el primer cuarto de hora de juego. Una losa difícil de levantar.

A Vicente Moreno no le gustó lo que vio el pasado miércoles en Copa del Rey. El técnico valenciano no se arrugó a la hora de confeccionar su once y dio entrada a Joan Sastre como titular. Ferran Giner se quedó en la banqueta y Fran Gámez se desplazó al carril zurdo donde ya había demostrado, en numerosas ocasiones, desenvolverse con soltura.

Con Álex López viendo el encuentro desde la grada y Buenacasa en la convocatoria, empezó el encuentro en un reivindicativo Carlos Tartiere. Los integrantes de la peña Symmachiarii y gran parte de su afición no irrumpieron en el fondo norte del estadio hasta el minuto 14, como protesta a las fuertes medidas impuestas por la Comisión Antiviolencia con el conjunto carbayón.

El asedio de los de Anquela y el despiste de los de Moreno se aliaron desde el minuto uno. El Mallorca ofreció su imagen más pobre desde el inicio de esta temporada, con incomprensibles pérdidas de balón y una falta de chispa inédita en los jugadores mallorquinistas.

Pese a la gran superioridad de los locales, el Oviedo se alió con la fortuna para mover el marcador. Solo se llevaban nueve minutos disputados cuando, tras una jugada a balón parado, el esférico llegó rebotado a Ibra que, con casi tanta intención como suerte, cabeceó el balón al interior de la portería defendida por Parera. Poco o nada pudo hacer el guardameta manacorí para impedir el tanto.

Tras el gol, el guion del partido no varió. Folch, en el 24, probó a Parera con un potente disparo desde la frontal. El cancerbero mallorquín se exhibió con una gran intervención. Veinte minutos después, y con el Mallorca todavía sin comparecer sobre el verde, el exrojillo Tejera fabricó un potente disparo que Parera despejó para evitar el 2 a 0. El descanso fue la mejor noticia para los bermellones durante el primer periodo.

Con la reanudación, regresó al fin el Mallorca. Aridai se echó el equipo para reactivar el juego. Corría el minuto 52 cuando el extremo canario firmó una gran internada por banda diestra para dar un pase de la muerte a Lago Junior. El delantero costamarfileño no desaprovechó la ocasión y puso las tablas en el marcador. Anotó su cuarto tanto de la temporada y se convierte en el actual pichichi del equipo.

El Mallorca se vino arriba. Castro y Stoichkov saltaron al verde en sustitución de Dani y Abdón y el conjunto bermellón empezó a inquietar con bastante peligro la portería defendida por Champagne. Castro, en el minuto 64, envió la pelota a pocos centímetros del poste. En el 68, Xisco Campos peinó un balón que no encontró respuesta.

Moreno introdujo a toda su artillería pesada con la entrada de Buenacasa por un ya devastado Lago Junior. En los últimos minutos Raíllo tuvo que esforzarse al máximo para evitar las arrancadas ovetenses. Sastre despejó un gol cantado del rival y Aridai dispuso de las mejores ocasiones para su equipo, pero desaprovechó la oportunidad, solo, en un mano a mano ante el portero.