Martin Valjent ha explicado el calvario que sufrió en los últimos minutos del duelo ante el Extremadura al sufrir un fuerte golpe en el riñón, que le obligó a abandonar el estadio en ambulancia y quedar ingresado en la Clínica Juaneda, donde sigue en observación. Esta lesión le provocó un hematoma que precisa de control médico para evitar complicaciones renales y su periodo de baja, de momento, está pendiente de ser determinado al estar condicionado a su evolución, aunque será de mínimo de un mes.

“Durante el partido tuve muchos choques con los delanteros rivales y, cuando faltaban unos 15-20 minutos, noté un golpe en la espalda en una disputa, fue cuando empecé a tener dolor”, ha desvelado el defensa, que cometió el penalti en el minuto 90 sobre Enric Gallego que evitó el triunfo del Mallorca. El internacional eslovaco afirma que nunca había notado unas molestias de este tipo: “Además del dolor en la espalda, me costaba respirar y no podía correr con normalidad. Era un dolor que no tenía identificado, extraño, e intenté acabar el partido como pude, sufriendo. Lo único que quería era ayudar a mis compañeros”, ha señalado en declaraciones al club.

Valjent ha asegurado que mejora día a día y desea volver pronto a la dinámica de grupo: “Me encuentro bien y apenas siento dolor, aunque estoy en la cama y no me puedo mover. Estoy convencido de que mejoraré día a día y ya estoy deseando volver a estar con mis compañeros sobre el césped”.

El zaguero ha querido lanzar un mensaje por las constantes muestras de cariño que ha recibido desde el domingo. “Estoy solo sin mi familia y el club y mis compañeros de vestuario están aquí como si fueran mi familia. Cada día vienen a verme companeros, miembros del cuerpo técnico o directivos. Estoy muy agradecido y contento de formar parte de este club”, ha concluido su mensaje.