Fue el goleador inesperado. Después de hasta cinco ocasiones claras de gol del Mallorca, Álex López, que hacía tan solo seis minutos que estaba sobre el terreno de juego tras sustituir a Abdón, fue el artífice de la victoria rojilla. Totalmente merecida. Porque ocasiones tuvo para dar y tomar en una segunda parte de gran nivel. Fue el premio máximo para un jugador que lo está pasando mal esta temporada. Titular indiscutible la pasada campaña y hombre importante en el meteórico ascenso del equipo a Segunda, en esta campaña ha visto cómo Castro le ha quitado el puesto y Abdón se ha hecho merecedor a la titularidad.

Pero el catalán, de 24 años, es un jugador que persiste. Nunca se rinde. Moreno le dio carrete en los últimos minutos para intentar hacer lo que finalmente hizo, aprovechar una de esas jugadas de estrategia que Dani Pendín, brazo derecho de Moreno, tantas veces ensayan en los entrenamientos. El saque de esquina, en el enésimo intento del Mallorca por batir a Cifuentes, fue botado por Salva Sevilla. Y el balón llegó al más listo de la clase, a Álex López, que remató con la zurda para dar una alegría inmensa a la sufrida afición mallorquinista.

"Se lo dedico a mi familia y sobre todo a mi novia", dijo un exultante Álex López a las cámaras de Gol Televisión. "Ha sido un partido muy sufrido, sabíamos que a la contra el Cádiz es muy peligroso, pero se ha hecho justicia porque en la segunda parte hemos disfrutado de grandes ocasiones. La estrategia la trabajamos muy bien. El equipo está agradecido del trabajo de toda la gente", comentó el goleador y protagonista de la noche, que ha colocado al Mallorca en lo más alto de la clasificación y con el equipo en una nube en este gran comienzo de temporada.