Abdón Prats acalló ayer en Son Moix todas las voces que ponen en duda su potencial. El delantero de Artà se reivindicó con un gol desde los once metros y, sobre todo, con una entrega desmedida. El pichichi de la pasada temporada exigió, con el partido que firmó ayer ante Osasuna, un puesto en el once titular del equipo.

Vicente Moreno apostó por el jugador mallorquín en el estreno del Real Mallorca en Segunda División. Con cinco goles durante la pretemporada, Abdón ya había demandado un hueco, y el técnico de Massanassa sucumbió a sus encantos. El futbolista de Artà no defraudó.

Corrió, luchó, peleó cada pelota, ganó casi todos los balones por alto, generó peligro constante y, en el minuto 43, cuando Carlos Castro cayó al suelo dentro del área y el colegiado señaló penalti, Abdón no se amedrentó y decidió lanzar él el balón desde los once metros.

Con tez seria colocó el esférico ante el guardameta osasunista y lo golpeó para poner el 1 a 0 en el marcador, resultado con el que se llegó al final del encuentro. El de Artà celebró el tanto con rabia y entusiasmo, junto a los suyos, el mallorquinismo.

Los rumores sobre una posible salida del mallorquín no han cesado durante el presente mercado estival. A principios de julio fueron muchas las voces que le colocaron en El Sardinero o la Cultural Leonesa, pero él calló y siguió trabajando. Ayer saltó al terreno de juego en el once titular. Pese a la amplia competencia en la línea ofensiva, con los fichajes de Sergio Buenacasa, Carlos Castro y Stoichkov y la continuidad de Álex López, Moreno apostó por su goleador de la pasada campaña.

Abdón aguantó los 90 minutos del encuentro ante Osasuna. El futbolista buscó el desmarque constantemente, defendió cuando el equipo lo precisó y alentó a los suyos cuando el Mallorca se vino abajo durante los últimos minutos del partido. El delantero se reivindicó sobre el verde. La afición no tiene ninguna duda: Abdón Prats debe estar en el once.