Pervis Estupiñán se ejercitó ayer por primera vez a las órdenes de Vicente Moreno en el entrenamiento vespertino después de que el Mallorca hiciera oficial por la mañana su cesión, por parte del Watford británico, hasta final de curso. La llegada del lateral izquierdo ecuatoriano, que la pasada campaña militó en el Almería, complica la presencia de Bonilla. El soriano, uno de los indiscutibles la pasada campaña para Moreno, tiene las puertas abiertas para salir ya que el técnico no quiere a tres jugadores para una posición tan específica. Da la impresión que el de Massanassa prefiere mantener a Salva Ruiz, que tuvo un rol de suplente en Segunda B, que a Bonilla, que estuvo a un gran nivel en la temporada del ascenso. El Hércules es uno de los clubes que están pendientes de este futbolista, con mucha experiencia en la división de bronce.

Pervis Estupiñán, de 1,75 de estatura de altura, es un lateral de largo recorrido que destaca por su intensidad, aunque no está entre sus mayores virtudes el manejo del balón. El internacional sub-20 disputó 26 encuentros, 16 de ellos como titular, en el Almería y puede presumir de haber debutado en Primera, en la 2016/2017, en Granada.