Cedric Omoigui se despidió ayer de los aficionados del Mallorca a través de su cuenta personal en las redes sociales en una emotiva carta en la que agradece su experiencia como bermellón. El delantero, que este curso ha tenido un papel secundario en el primer equipo, en el que ha anotado dos tantos en partidos oficiales, anuncia que se marcha "con la suficiente madurez para afrontar lo que viene por delante". El ariete, de 23 años, finaliza contrato este 30 de junio y el club le comunicó ayer que no tenía intención de renovarle. "Gracias de corazón a la familia mallorquinista", se despide en su nota uno de los jugadores más carismáticos de la cantera.