Motivos para ser optimista
01 Un equipo enchufado
Si el Mallorca afronta el partido del próximo domingo con la confianza y la entrega con la que lo hizo en Son Moix,confianza y la entrega con la que lo hizo en Son Moix hay pocos motivos para la preocupación. El equipo entró al terreno de juego mucho más enchufado que el Mirandés, que se demoró más de una hora en darse cuenta de lo que se jugaba, y cuando lo hizo ya iba con dos goles en contra. El conjunto de Moreno demostró ser muy superior al mejor líder de los cuatro grupos de Segunda B, y en todas las líneas. Por lo que, por poco bien que lo hagan en Anduva, el ascenso a Segunda debe ser un hecho para los jugadores del Mallorca.
02 Una ventaja importante
Es verdad que el gol de Camacho a quince minutos del final frenó de forma abrupta la euforia que se vivía en Son Moix entre una afición entregada con su equipo. Pero la diferencia de dos goles debe resultar suficiente, aún sabiendo que se va a sufrir, y más si el equipo encaja en la primera parte. El objetivo debe ser marcar en Anduva, lo que obligará al Mirandés a batir tres veces a Reina para provocar la prórroga y cuatro para eliminar a su rival y ascender. El 3-1 de la ida es como si el Mallorca hubiera ganado 1-0, pero con la importante diferencia de que una derrota por este resultado en Miranda de Ebro asciende al Mallorca.
03 Victorias estrechas del Mirandés
Pese al indiscutible liderato en su grupo -con 76 puntos ha sido el equipo que más ha sumado de los ochenta equipos de Segunda B-, el Mirandés es un conjunto al que le cuesta resolver los partidos con solvencia. Hasta el punto de que solo en tres ocasiones en toda la temporada ha ganado sus partidos por más de un gol de diferencia.
Y eso que cuenta con uno de los más afamados goleadores de la categoría, el veterano Cervero, autor de 24 dianas. El Mallorca debe jugar con la ansiedad del Mirandés, que es el que debe ir a por una victoria holgada si quiere ascender de forma directa a Segunda División.
Motivos para dudar
01 Trayectoria discreta lejos de Son Moix
La discreta trayectoria del equipo lejos de Son Moix, sobre todo en la segunda vuelta, ha dejado mucho que desear y genera dudas sobre lo que pueda hacer el equipo en Anduva. Las cuatro derrotas en los desplazamientos en toda la temporada han llegado en una segunda vuelta muy irregular. El equipo perdió ante el ya equipo de Tercera Peña Deportiva, en lo que fue la primera derrota de la temporada; 3-1 en Cornellà, un resultado que de producirse en Anduva conduciría a una prórroga; 2-1 en Valencia y 1-0 en Sabadell, en lo que posiblemente haya sido el peor partido de los 38 disputados.
02 Endebles en defensa
Parece que ha pasado una eternidad de cuando el Mallorca no encajaba goles. Ni siquiera le creaban ocasiones. Eso era a principio de temporada. Pero desde hace ya demasiadas jornadas el equipo de Moreno se ha mostrado muy endeble en defensa, hasta el punto de que si no se tiene en cuenta el intrascendente último partido ante el colista y descendido Deportivo Aragón, Reina solo ha acabado dos partidos con la portería imbatida, en Llagostera y en Elche en esta segunda vuelta, que es cuando el equipo ha mostrado más dudas y, por consiguiente, ha bajado su rendimiento con respecto a la primera vuelta.
03 Espera un ambiente infernal
Ya se encargó de recordarlo Pablo Alfaro en la rueda de prensa del domingo, tras caer 3-1: "Anduva va a ser una caldera, una olla a presión, no caben 15.000, pero a los 6.000 se les oirá". El técnico del Mirandés tiene claro que el público local debe ser el jugador número doce, el que empuje al equipo hacia el ascenso. A este ambiente se tendrá que adaptar el Mallorca, que contará con solo 350 incondicionales ya que el conjunto burgalés quiere el máximo apoyo a su equipo desde las gradas. Anduva es un estadio de mal recuerdo para los rojillos. Allí perdieron la categoría la temporada pasada. Pero la historia cuenta poco ahora.
