Rubén Herráiz, Rufo, jugador del Badalona cedido por el Mallorca, no jugará mañana el partido de Son Moix correspondiente a la penúltima jornada por la aplicación de la 'cláusula del miedo', que se denomina a las cesiones que contemplan que el jugador cedido no puede jugar contra el club que posee sus derechos. Esta fórmula la aplica habitualmente el Mallorca. Esta temporada ya lo ha hecho con el delantero Alberto Toril que, cedido a principio de temporada al Olot, no ha disputado ni uno de los dos partidos contra los mallorquinistas.

Rufo, que jugó de titular contra la Llagostera en la sexta jornada en Son Moix, sustituido por Fernando Cano a los diez minutos de la segunda parte, es un habitual en el Badalona, donde ha jugado doce partidos desde que fue cedido en enero. Su único gol lo marcó en la victoria por 3-0 al Atlético Baleares. Rufo marcó el segundo y dio la asistencia del tercero, en la que posiblemente ha sido su mejor actuación esta temporada con el conjunto catalán.

Rufo, que llegó al Mallorca procedente del Espanyol B, no ha contado para Vicente Moreno, quien tras concederle la titularidad ante la Llagostera, no volvió a disputar ni un minuto y la mayoría de las veces quedó fuera de las convocatorias.

El Mallorca tiene cedidos esta temporada, además de a Rufo, a Grima al UCAM Murcia, a Néstor Salinas a la Ponferradina, Bryan Reyna al Toledo y Pol Roigé al Celta B.