Una docena de mallorquinistas que acudieron a animar al equipo a La Nova Creu Alta de Sabadell seguían todavía este lunes en Barcelona después de que Ryanair cancelara el vuelo de las 22.30 del pasado domingo con destino a Palma sin dar explicación alguna. Tras cerca de tres horas de cola para poner la reclamación, la compañía aérea les acomodó en un hotel y les confirmó que, hasta este martes a las 8 de la mañana, no podrían recolocarles en otro vuelo.