Otro mal partido de Lago Junior, que pasó de puntillas por Santo Domingo y cuando se dejó ver fue para fallar una clara ocasión de gol que hubiera supuesto el empate, un mal menor tal como fue el partido. El africano se diluyó en la primera parte, nefasta de todo el equipo, que se vio superado por un Alcorcón que demostró que sí iba a por la victoria, y demostrando lo que realmente se jugaban. En la segunda, con el gol en contra, al Mallorca no le quedó más remedio que estirarse. Y fue en el minuto 50, cuatro después del gol de Owona, cuando Lago desaprovechó un centro medido de Salomao desde la banda derecha, pero el remate del marfileño se encontró con una mano prodigiosa del guardameta local. A los 66 minutos, como ante el Levante, fue sustituido por Pol, culminando una pobre actuación, personal y del equipo.