Mateu Alemany está cerca de convertirse en el hombre fuerte del Valencia de Peter Lim. El andritxol, histórico dirigente del Real Mallorca, negocia desde hace semanas con la entidad 'ché' su fichaje como director general. En caso de que los contactos cristalicen en un acuerdo, el mallorquín aportará su experiencia para diseñar el Valencia 2017/18, un proyecto ilusionante que debería hacer olvidar el fiasco de la presente temporada.

Alemany llegaría al club de Mestalla para llenar el vacío de poder abierto por culpa de la profunda crisis institucional y deportiva que ahoga al Valencia desde hace mucho tiempo. Lim, dueño de la entidad, quiere contratar a un ejecutivo de máximo nivel para que lleve las riendas de la institución mientras él se ocupa de sus negocios en Singapur.

De este modo, el andritxol ocuparía un lugar muy destacado en un organigrama ahora encabezado por la presidenta, LayHoon Chan; y el consejero delegado, Anil Murthy. Ambos gestores, muy impopulares entre el valencianismo, han restado credibilidad al proyecto pese a que Lim ha inyectado 200 millones de euros en los dos últimos años en la tesorería 'ché'.

"Como un proceso continuo para fortalecer la estructura y la gestión del club, incluyendo la contratación de un CEO (director general), el club ha estado buscando a varios candidatos españoles. Uno de ellos es el Sr. Alemany, con quien el club se ha reunido. El VCF desea aclarar que el Sr. Tebas no está involucrado en ninguno de los procesos de contratación del club", publicó el Valencia por la tarde a través de su página web para desmentir algunas informaciones que apuntaban al presidente de la Liga de Fútbol Profesional como la figura que ha puesto al mallorquín en la órbita de Lim.

Según pudo saber DIARIO de MALLORCA, Alemany está más que dispuesto a embarcarse en esta nueva aventura después de casi siete años alejado de la primera línea. En verano de 2010 el andritxol traspasó la mayoría de las acciones del Mallorca al grupo que encabezaba Llorenç Serra Ferrer, con la promesa de que nunca más volvería a ponerse al volante de la entidad balear.

Desde entonces han sido muy pocas las veces en las que se ha dejado ver en algún acto público. Y nunca para comentar la tortuosa trayectoria del Mallorca en estos años de convulsiones deportivas e institucionales.

Su última aparición se remonta al mes de diciembre, en la inauguración de la penya mallorquinista de Andratx. Antes, en febrero, fue uno de los grandes protagonistas de la gala del Centenario celebrada en el Teatre Principal, un canto a la nostalgia por una época exitosa en la que él tuvo mucho que ver.

Gestor y bombero

Alemany fue el ejecutivo de la clasificación para la Champions en 2001, el de la victoria en la Copa del Rey de 2003 y el bombero que apagó el incendio provocado por la declaración del concurso de acreedores en 2009. Entre medias tuvo tiempo para disputar la presidencia de la Española al longevo Ángel María Villar y rechazar una oferta de Florentino Pérez para dirigir el Real Madrid.

Ahora le tienta el Valencia, un acorazado que navega a la deriva mientras aguarda la llegada de un ejecutivo que marque el rumbo correcto. El andritxol, socio del Mallorca y todavía en posesión de un porcentaje residual de acciones, está dispuesto a asumir el desafío.