Javier Olaizola volvió a echar mano de su discurso más apasionado, marca de la casa, para defender su trabajo en el banquillo del Real Mallorca pese a que los resultados le esquivan. El técnico apeló a la calma y a la fe cuando fue preguntado si entendería que el club le destituyera en caso de que el equipo no gane esta tarde al Lugo en Son Moix. Y lanzó un ruego.

"Llevo once partidos. Si el equipo fuera un desastre o no hubiera mejorado... Si viene un entrenador con una varita y ganamos ahora mismo me voy a mi casa, yo soy mallorquinista. Dejadme estar un partido más, que hace tres semanas me pedían por la renovación y ahora me piden por la destitución. Dejadme respirar. Que aquí hay entrenadores que les han dado quince o veinte partidos y no se les han hecho tantas preguntas. Entiendo perfectamente que el fútbol son resultados, pero quedan todavía catorce jornadas. Vamos a tener pausa y calma. Esoy convencido de que lo voy a sacar, y así me lo hace ver la gente que está en la calle, los futbolistas... Ellos lo ven como yo, me dicen que no entienden por qué les pasa esto, que les entra un canguelo cuando van ganando por la posibilidad de acabar perdiendo. Es un tema que arrastramos desde hace cuatro temporadas. Dejadme disfrutar unos partidos más, y si veo que no lo saco, tranquilos que cuelgo el silbato y el cronómetro", enfatizó el preparador bermellón.

El donostiarra se declaró "motivadísimo" para seguir al frente del Mallorca y desveló que habló con un ´coaching´ para analizar la vertiente psicológica de este bache deportivo. "La situación es comprometida evidentemente. Pero yo valoro cómo está funcionando el equipo. Me he reunido con un ´coaching´, una persona que ayuda a mejorar a nivel psicológico o a reponerse de situaciones adversas. Me comentó que el problema es que solo estaba analizando el resultado. Entiendo que hay necesidad imperiosa de ganar; no solo por esta temporada, sino porque venimos arrastrando esto desde hace tiempo. Pero los resultados llegarán si seguimos por este camino. Me han dado muchos palos porque el otro día dije que estábamos en una línea ascendente. Pero es que si eres neutral y repasas los últimos partidos ves que merecemos más puntos de los que tenemos. Cuanto mejor hagamos las cosas, más cerca estaremos del éxito", argumentó el técnico.

"No hay que ir a guardar la ropa"

Por otro lado, deslizó que volverá al 4-4-2 después de que la pasada jornada contra el UCAM probara con una línea de cinco defensas: "Tener por dentro a tres futbolistas siempre te da más garantías, pero a la hora de decidir miramos el delantero del equipo rival. Si jugara Joselu no hubiésemos jugado con cuatro seguro porque tiene una velocidad importante. Pero Caballero es un delantero más rematador, así que se puede valorar jugar con cuatro".

El técnico admitió que el equipo tiende a retroceder cuando está en ventaja, por lo que reclamó a sus jugadores que en esos casos busquen la sentencia: "Es un tema psicológico, pero no es de ahora. La situación es incómoda desde hace varias temporadas. Consigues algo y en lugar de finiquitar los partidos te echas hacia atrás esperando que pase el tiempo. Es un error, no tenemos que ir a guardar la ropa".