Saúl García, primer refuerzo del Real Mallorca este mercado de invierno, se presentó con un discurso ambicioso e ilusionante ante el ciclo que acaba de inaugurar como bermellón. El lateral zurdo, que llega para disputar la titularidad a Joan Oriol, jugará cedido procedente del Deportivo de la Coruña hasta junio.
"Oriol es un gran futbolista, con una dilatada carrera. Pero vengo a competir por un puesto y espero ganar esa lucha que tenemos entre los dos", declaró el nuevo futbolista rojillo durante su presentación, en la que estuvo flanqueado por Maheta Molango y Javi Recio.
"Venir aquí significa dar un paso adelante muy importante en mi carrera después de la mala experiencia que he tenido en Girona. Quiero volver a sentirme importante en un equipo con mucha historia como este", explicó el cántabro, de 22 años.
Llega a la isla después de un primer tramo de temporada en el que apenas ha jugado al no entrar en los planes de Pablo Machín. Saúl ha sumado 200 minutos en el conjunto catalán, donde no sintonizó con un técnico que prefirió carrileros de mayor recorrido por la banda.
"No tuve la confianza suficiente del entrenador. Él optó para la posición de carrilero por jugadores más extremos que laterales. Yo pensaba que querían un lateral ofensivo, pero me encontré con que buscaban un perfil de jugador más atacante", indicó Saúl.
Preparado para debutar
"El Girona es un club que ha hecho las cosas bien estos últimos años. Es un equipo muy competitivo, y espero trasladar aquí esa competitividad durante estos seis meses. Y ya veremos en un futuro lo que pueda suceder", subrayó el defensa, que aseguró estar en buenas condiciones físicas para debutar el viernes contra el Mirandés si Javier Olaizola lo considerara oportuno.
Saúl indicó que la clasificación del Mallorca, en descenso, no le supuso ningún problema a la hora de aceptar la propuesta de la entidad balear. "Es un club histórico que está en una situación delicada. Pero tiene grandes jugadores y una plantilla muy buena que puede hacer cosas importantes", destacó.
Sin embargo, no se planteó objetivos a largo plazo: "Tenemos que centrarnos en el partido del viernes. Conseguir los tres puntos y salir de esas posiciones de descenso. Después ya se verá lo que depara la Liga. Esto está muy igualado".
El lateral tiene experiencia en la categoría después de militar en el Tenerife y en el Racing de Santander, donde se formó. En ambos clubs ofreció un buen nivel, lo que le ha valido para que en el Dépor le consideren un futbolista con mucho potencial.
Girona supuso un paso atrás en su carrera, pero tanto el futbolista como Molango confían en que en la isla recuperará su mejor versión. "Pese a su juventud, lleva más de cincuenta partidos en Segunda División en plazas importantes como Tenerife y Santander. Es uno de los laterales jóvenes con más proyección de la categoría. Le seguíamos desde hace tiempo. En verano no pudimos incorporarle, pero ahora nos ha parecido una gran opción y esperamos que demuestre el nivel que ya ofreció en el Tenerife y en el Racing", valoró el consejero delegado.
El lateral zurdo es uno de los puntos débiles de la plantilla porque Joan Oriol está ofreciendo un rendimiento muy irregular. Y Alberto López, quien debía disputarle el puesto, no ha tenido minutos.
