Fernando Vázquez va despejando dudas acerca de sus intenciones de cara al trascendental encuentro del domingo ante el Huesca. Pleguezuelo, Joan Oriol, Pol Roigé y Óscar Díaz, más el regreso de Juan Rodríguez tras su lesión, se antojan como las grandes novedades del Mallorca para el partido ante los oscenses. Estos cinco futbolistas, que no salieron de inicio en la anterior jornada frente al Lugo, actuaron ayer con el téorico equipo titular en el entrenamiento en Son Bibiloni, por lo que sería una revolución en toda regla. Eso sí, de nombres, porque el sistema de juego sería el habitual.

El entrenador de los bermellones apostó por Cabrero en la portería ya que Santamaría sigue recuperándose de sus problemas musculares. Y en la defensa habrá dos caras nuevas respecto al choque en el Anxo Carro. Oriol regresaría al lateral izquierdo en detrimento de Biel Company, que sería el gran sacrificado, mientras que el lesionado Raíllo, hasta ahora indiscutible para Vázquez, sería sustituido por Pleguezuelo.

El mallorquín, que todavía no se ha estrenado en la Liga, parte con ventaja respecto a Ansotegi, tal y como probó ayer el entrenador, por su velocidad y capacidad de anticipación. El de Castrofeito prefiere al cedido por el Arsenal que el vasco, que destaca por su gran corpulencia pero que no es rápido, un aspecto importante si el que está a su lado es Yuste, que tiene unas características similares. En el lateral derecho se mantendrá Campabadal, que parece que se ha hecho con el puesto tras la expulsión de Company en Cádiz de la segunda jornada. En el centro del campo también vuelve Juan Rodríguez, que no jugó por lesión ante el UCAM Murcia y Lugo, por lo que Damià deberá esperar. El malagueño se ubicará junto a Juan Domínguez y Culio, mientras que el ataque también cambiará de nombres. Moutinho y Lago Junior, por lo ensayado ayer, se quedarían en el banquillo para dejarle sitio a Pol Roigé, que dispondría de una gran oportunidad y Brandon en las bandas, con Óscar Díaz en la punta de ataque. El delantero centro, sobre el que recaen todas las miradas por la falta de gol del Mallorca en este inicio de Liga, tendría la ocasión de volver a disponer de minutos después de haberse quedado sin jugar en la anterior jornada. De hecho, en tierras lucenses Vázquez prefirió a Adrià Dalmau para ser más ofensivos en la segunda parte.

El caso de Pol Roigé es diferente porque ha tenido mucho menos protagonismo y, tal y como reconoció el propio entrenador hace unas semanas, el catalán le había adelantado a Salomao en su orden de preferencias. Parece que ahora también ha superado en la misma lista al propio Moutinho y Lago Junior. Lo que es seguro es que, juegue quien juegue, el Mallorca necesita ganar de una vez por todas. De lo contrario, los fantasmas sobrevolarán el Iberostar Estadio, algo a lo que jamás debería acostumbrarse.